Hay pasiones a las que no se pueden renunciar por mucho que se intente. Que se lo digan a Antonio Lobato, la voz de la Fórmula 1 en España entre 2004 y 2015, que ha decidido entregar de nuevo su tiempo al motor, como director de Laf1.es. El periodista anunció hace dos años que no se desplazaría a los circuitos, salvo alguna excepción, para estar con su familia. En 2015 Antena 3 emitió desde un plató los Grandes Premios, antes de ceder los derechos a la cadena privada Movistar +. Lobato se despidió entre lágrimas, pero ha tardado muy poco en regresar al gran circo.
Una carrera ligada a la Fórmula 1
Pocas veces un rostro se ha asimilado tanto a un deporte, como el de Lobato a la Fórmula 1. Durante doce años se han emitido carreras en abierto y todas han sido narradas por él. 222 Grandes Premios avalan al periodista, que tuvo la suerte de coincidir en su estreno con la etapa más gloriosa de Fernando Alonso. Él fue quien contó los dos títulos mundiales del asturiano, un hito en la historia del deporte español. Las audiencias en Telecinco se dispararon y superaron incluso al fútbol, con cuotas de pantalla de hasta el 50%.
Lobato se convirtió en un icono de Mediaset, pero cuando La Sexta adquirió los derechos de la Fórmula 1 en 2009, él también cambió de rumbo. Lo mismo sucedió en 2012, cuando Antena 3 asumió los costes de un negocio que comenzaba a ser menos rentable. Con Alonso fuera de la pugna por el triunfo, las audiencias descendieron notablemente, hasta que este año el grupo de Atresmedia renunció a mantener la emisión de la F1, en manos de Movistar +, y Lobato anunció su adiós.
Dos despedidas ficticias
Un adiós que no ha sido el primero. A lo largo de 2014 el periodista insistió en que no seguiría en la Fórmula 1, si ello llevaba implícito estar 160 días fuera de su hogar. Lobato, con una hija de catorce años, manifestó su deseo de pasar más tiempo con su familia, después de once años en los que ha viajado por todo el mundo para cubrir cada Gran Premio. “Yo tengo ganas de ir a una carrera para no trabajar. Disfrutar, ver en mi casa la F1 y no tener responsabilidad”, explicó el presentador.
“Adiós y gracias”, comentó para despedir la temporada 2014 y, presumiblemente, su carrera vinculada a la Fórmula 1. Sin embargo, Atresmedia decidió ceder y emitir desde un plató las carreras, con la figura de Lobato. El periodista aceptó y dirigió las retransmisiones sin viajar, salvo alguna excepción. A finales del pasado curso, consciente de que Antena 3 no renovaría sus derechos, se despidió entre lágrimas: “Así, como quien no quiere la cosa hemos llegado al final del camino, y aunque sé que la vida da muchas vueltas, creo que esta ha sido mi última carrera”.
La pasión le obliga a regresar
Al final se equivocó y no ha podido aguantar al margen de la Fórmula 1. Lobato, junto a Cristóbal Rosanely, dirigirá la web Laf1.es. Una vida más apacible, ya que escribirá a través de la plataforma digital y no será necesario que se desplace a los diferentes grandes premios, aunque no sería extraño que decidiera dar ese paso algún fin de semana. Mostrará sus experiencias en un videoblog, como la inminente Titan Desert, en la que participará por segundo año consecutivo. Informará y opinará también en este portal. Pese a su intento por desvincularse de la Fórmula 1, su pasión le ha obligado a regresar.