La luz de Michael Schumacher puede apagarse en muy poco tiempo. Ya han pasado dos años y medio de su fatídico accidente de esquí en Méribel y por lo que parece su estado de salud no ha avanzado mucho desde que salió del coma inducido. De hecho, según News Every Day, un neurocirujano muy cercano a la familia le da casi por desahuciado.
Según este profesional sanitario, el káiser “necesita un milagro para seguir vivo”. Por eso, cualquier pequeño cambio en su estado de salud podría costarle muy caro ya que “la vida de Schumacher pende de un hilo”. No obstante, durante todo este tiempo ha habido todo tipo de especulaciones en torno al estado de salud del exferrarista y el secretismo de la familia no ha hecho más que multiplicar las hipótesis.
Los allegados al expiloto alemán no quieren ofrecer ningún detalle porque durante su estancia en el hospital de Grenoble vivieron más de un incidente desagradable con la prensa. Por eso, desde que en septiembre de 2014 ‘Schumi’ se trasladase a su casa en suiza, las aclaraciones sobre su estado de salud han sido muy escasas.
La familia no pierde la paciencia
Pese a todo, los Schumacher no pierden la esperanza en ningún momento, aunque solo sea públicamente. “Sabemos que lo que ha pasado es algo que no podemos cambiar. Solo podemos esperar que con paciencia y el apoyo de todos algún día Michael pueda estar nuevamente con nosotros”, comentó en abril la portavoz de la familia, Sabine Kehm.
Por otra parte, el coste del tratamiento alcanza ya los 16 millones de euros, según Christian Today. El expiloto cuenta con la ayuda de varios fisioterapeutas y una suite medicalizada en su domicilio, pero parece que el dinero en estos casos tampoco lo es todo.
Además, Michael se ha perdido los inicios de su hijo Mick en la Fórmula 4. El joven de 17 años ya ha conquistados sus primeros triunfos en los campeonatos de esa categoría en Italia y en Alemania. Asimismo, ha llegado a sonar como futurible para la Fórmula 1, por lo que la saga Schumacher tendría una continuación tras las retiradas de su padre y su tío.