Nico Hülkenberg enberg ha sido confirmado como el segundo piloto del equipo Haas para la temporada 2023 de Fórmula 1. El alemán de 35 años de edad retorna así a la categoría reina del automovilismo tras tres años sin competir una temporada completa. Hülkenberg tomará el puesto del también alemán Mick Schumacher, quien a priori se marcha de la F1 tras apenas dos temporadas y cuando estaba realizando cada vez mejores actuaciones.
Hülkenberg cuenta con unas 181 carreras disputadas hasta la fecha, las más recientes a principios de este 2022 con Aston Martin, sustituyendo a Sebastian Vettel. También estuvo presente como reemplazo de los pilotos de Racing Point (el mismo equipo Aston Martin antes de que Lawrence Stroll adquiriera la mayor parte del accionariado de la marca británica) en 2020. Su debut se produjo en 2010 con Williams después de que fuera campeón de GP2 (la actual Fórmula 2) en 2009 con una temporada aplastante. De hecho, le dio a Williams una pole sorpresa en Interlagos aprovechando condiciones cambiantes.
¿Es Hülkenberg la decisión correcta?
Ahora bien, Hülkenberg, en esas más de 180 carreras disputadas, no ha logrado ni una sola victoria. De hecho, nunca se ha subido al podio de una carrera de Fórmula 1. En muchas ocasiones ha estado cerca, como en Alemania 2019. O quizás la más dolorosa, aquel Brasil 2012 en el que llegó a liderar la carrera. Si no hubiera tenido aquel toque con Lewis Hamilton, quizás hubiera podido llegar hasta el ansiado podio. Además de Williams, Hulkenberg ha militado en Force India/Racing Point/Aston Martin, Renault y Sauber.
La mayor gesta de Hülkenberg no es haber disputado cerca de 200 carreras, cifras a las que llegará si completa la temporada 2023 con Haas. Su mayor éxito hasta el momento es haber ganado las 24 Horas de Le Mans de 2015 con Porsche en el retorno exitoso de la marca con el 919 Hybrid frente a Audi y Toyota. Hulkenberg logró vencer en su única participación en la gran carrera, triunfando junto a Earl Bamber y Nick Tandy. Antes de Le Mans había disputado las 6 Horas de Spa, logrando una respetable sexta posición.
Estar tres años sin hacer una temporada completa juega muy en contra en F1. De hecho, Fernando Alonso estuvo dos años apartado (corriendo para Toyota en el Mundial de Resistencia y una aparición estelar en el Dakar 2020) y necesitó seis meses para volver a tener su ritmo característico. En el caso de Hulkenberg son tres años y llega a un equipo de la zona media-baja o la cola del pelotón. El germano ha preferido el que puede ser un último tren de la F1 antes que buscar un programa interesante en otra categoría, como el propio WEC o cualquier categoría de GT.
Hülkenberg y Magnussen juntos
La relación entre Hülkenberg y su futuro compañero de equipo, Kevin Magnussen, será mirada con lupa por muchos en todo el mundo. En la actualidad mantienen una relación cordial, o al menos eso ha trascendido. No obstante, años atrás no podían ni verse. Tuvieron varios encontronazos en pista, uno de ellos desembocando en estas imágenes.
Magnussen es conocido por ser muy duro – rudo, incluso – tanto con pilotos como con otras personas del paddock de Fórmula 1, incluidos también periodistas. Muchos pilotos han tenido encontronazos cuando se han enfrentado a los movimientos del danés. Movimientos que, aunque eran para defender posición, eran más agresivos que defensivos. En el caso de Hülkenberg llegaron a saltar chispas tras el Gran Premio de Hungría 2017.
¿Injusticia con Mick?
Lo cierto es que este 2022 no ha hecho demasiada justicia a Mick, hijo del legendario Michael Schumacher. Aunque las expectativas sobre él tuvieron que ver mucho por su apellido, demostró mucha mejoría este año con un Haas mucho mejor que el de 2021. En su temporada de debut tuvo, de largo, el peor coche de la parrilla y aún así era capaz de alcanzar de vez en cuando a otros coches. Además no tenía una referencia, pues estaba bastante por encima de su compañero Nikita Mazepin.
En este caso, al ser Mazepin despedido por razones directamente relacionadas por el conflicto armado entre Rusia y Ucrania, tenía al experimentado Magnussen. Este tuvo un gran inicio de año con un coche capaz de pelear en la zona media. Schumacher ha podido rehacerse y realizar muy buenas actuaciones, llegando a puntuar en varios grandes premios seguidos. Incluso llegó a pelear contra el campeón mundial de este año, Max Verstappen, durante algunas vueltas en Silverstone.
No obstante, Haas ha perdido mucho fuelle en la carrera de desarrollo frente a sus rivales, cayendo otra vez al fondo de la parrilla. Además, las decisiones y estrategias de carrera han jugado muchas veces en su contra, con stint demasiado largos con el neumático equivocado además de perder mucho ritmo en más de una ocasión. De no ser por ello, podría haber acabado más veces en zona de puntos.
También es cierto que Schumacher adolece de problemas de adaptación, tardando mucho en acoplarse al monoplaza. Le ha ocurrido en estos dos años de Fórmula 1 como también le pasó en su primera temporada de Fórmula 2, aunque pudo hacer una gran segunda temporada que le valió el título. Ahora bien, en el momento en el que dejó de figurar en la Ferrari Drivers’ Academy su lugar estuvo muy en entredicho. Por otro lado, Haas también ha desestimado la oportunidad de subir al asiento oficial a su tercer piloto, Pietro Fittipaldi, pese a darle sesiones de entrenamientos libres durante esta temporada.
La oferta que desechó en 2020
La llegada de Hülkenberg a Haas es un poco irónica. Y es que el equipo que lidera Guenther Steiner ya trató de hacerse con sus servicios tras la temporada 2019. Aquel año Hülkenberg salió de Renault dado que estos decidieron contar con Esteban Ocon para la temporada siguiente. Haas (en ese momento con Magnussen y Romain Grosjean como titulares) propuso una oferta al alemán, pero este decidió rechazarla entonces. Esta será además la segunda vez que Hülkenberg pilote con propulsores Ferrari, pues ya ocurrió en su etapa con Sauber (actual Alfa Romeo y futuro equipo Audi).