El Mundial de Rallycross ha tenido una temporada 2023 cuanto menos tumultuosa: desde el momento en que se produjo el incendio de los Lancia Delta de Special ONE en Lydden Hill, a finales del mes de julio, el campeonato se ha quedado en una posición de lo más extraña. Los coches RX1e no han estado corriendo desde entonces y todo parece indicar que no lo harán por el momento. De modo que, para que siga habiendo acción, los principales pilotos continuarán compitiendo, haciéndolo de ahora en adelante con los Zeroid X1 que tan buenos resultados han dado en la segunda división de este certamen FIA, la RX2e.
Como ya escribimos tiempo atrás en Estrella Digital, el incendio marcó un antes y un después para el Mundial de Rallycross. Se producía un hecho que no había ocurrido hasta ahora, ya no solo por el hecho de un incendio en un coche eléctrico. Se trata de un coche con las mismas especificaciones que todos los demás de su categoría, en unas circunstancias que aún no se han explicado. Es, por tanto, una situación nueva para la FIA y sobre la que se ha de sentar precedente, siempre con la seguridad como prioridad máxima.
Al mismo tiempo, la acción ha continuado en la categoría RX2e, así como en el Europeo de Rallycross con los Supercar, los mismos coches de combustión que se utilizaban en el WRX hasta la temporada 2021 y con los que la disciplina alcanzó su máximo esplendor en los años 2015, 2016 y 2017. También han seguido compitiendo los coches de Euro RX3, la segunda división dentro del Europeo de Rallycross del cual derivan algunos de los nombres legendarios dentro de esta disciplina.
De hecho, es que los otros tres certámenes ya tienen sus campeones de 2023 confirmados. Anton Marklund logró por cuarta vez ser el campeón de Europa de rallycross por delante de Janis Baumanis y Patrick O’Donovan. El sueco Nils Andersson se ha proclamado campeón de RX2e por delante de sus compatriotas Isak Sjökvist y Mikaela Ahlin-Kottulinsky, siendo cuarto el único español corriendo a tiempo completo, el canario Pablo Suárez. También se ha confirmado el campeón de Euro RX3, siendo el polaco Damian Litwinowicz por delante de Espen Isaksaetre y Nils Volland.
QEV Technologies, clave para el desbloqueo del Mundial de Rallycross
Para evitar que se continúe con este bloqueo del campeonato y poder celebrar las dos rondas restantes del calendario, el WRX ha decidido que se correrá con los Zeroid X1, los mismos coches de RX2e que ha desarrollado la empresa española QEV Technologies. Con sede en Cataluña, QEV Technologies es una de las empresas punteras en la fabricación de vehículos eléctricos de competición, como ha demostrado también con los SUV eléctricos que compiten en la Extreme E o en la Fórmula E, así como otros campeonatos como el Nitro Rallycross.
Sudáfrica y Hong Kong son las rondas finales de esta temporada 2023 del Mundial de Rallycross, siendo citas sólo puntuables para la categoría principal. Para los otros tres campeonatos la cita en el circuito alemán de Estering fue la ronda final, pero RX1e, además de las rondas canceladas de Lydden Hill, Mettet y Estering, tiene por delante dos rondas dobles en Ciudad Cabo y Hong Kong. Dicho de otro modo, tratará de disputarse para salvar los papeles y que se pueda considerar Campeonato del Mundo según los reglamentos de la FIA.
En estos momentos Johan Kristoffersson lidera el campeonato con una distancia holgada sobre Niclas Grönholm, Kevin Hansen y Ole-Christian Veiby – de hecho, Kristoffersson ganó las tres pruebas antes de que el campeonato se descarrilase en Lydden Hill. Aunque no era piloto valedero para puntuar o bloquear puntos, participó como invitado en Mettet con uno de los Zeroid X1…ganando la prueba frente a los pilotos habituales. Una muestra del dominio del gigante sueco en el rallycross, persiguiendo su sexta corona mundial, la que sería además su cuarta corona consecutiva.
La presencia de Kristoffersson está confirmada para este final de temporada, así como la de los hermanos Hansen en unidades idénticas del Zeroid X1. Un coche silueta con propulsión eléctrica y carrocería inspirada en el Ford Fiesta, fabricado por el equipo de origen sueco Olsbergs MSE. Mientras tanto, la FIA continúa investigando lo ocurrido con los RX1e en aras de encontrar solución y volver a darles uso a unos coches que, de momento, no están devolviendo el interés por el campeonato ni a las marcas ni a los espectadores.