Sam Bird ha conseguido la victoria en el ePrix de Sao Paulo tras un adelantamiento impresionante sobre Mitch Evans, el que fuera su compañero en Jaguar. Así, el británico consiguió darle a McLaren su primera victoria en la Fórmula E.
La ciudad de Sao Paulo ha vuelto a acoger este año, por segundo consecutivo, una carrera de Fórmula E. Pascal Wehrlein comenzó la prueba desde la Pole, por delante de los dos DS Penske. La salida fue bastante limpia, aunque lo más destacado fue la arrancada de Evans, que le sirvió para ponerse tercero. Wehrlein y Vandoorne fueron los primeros en activar el Modo de Ataque, lo que permitió que Da Costa heredase de forma momentanea el liderato de la carrera.
El más listo de la clase fue Bird, que aprovechó la lucha entre Wehrlein y Evans para activar el Attack Mode y de paso ponerse al frente de la carrera. Eso sí, la prueba estaba en un punto en el que nadie quería liderar para ahorrar energía. Llegó entonces el primer giro de guion, pues salió un primer coche de seguridad por los debrís que había en la pista. La carrera se puso en marcha con los Porsche en cabeza, seguidos de Vergne y de Bird.
El de McLaren pudo liderar cuando los tres de delante activaron el Modo de Ataque, pero levantó el pie del acelerador para dejarle el liderato a Evans. Llegó el segundo y último coche de seguridad cuando Nick Cassidy se chocó contra el muro en la Vuelta 16. La carrera se neutralizó hasta la 20, así que esos últimos giros hasta la meta fueron una especie de carrera al sprint.
Bird volvió a recuperar el liderato e intentó abrir hueco con los Porsche, que eran los que estaban en una mejor posición en términos de energía. Evans atacó a Bird para ponerse líder a falta de siete vueltas para el final, mientras que Wehrlein y Dennis también intentaron poner en apuros al de McLaren. El de Porsche no lo consiguió, así que terminó cayendo fuera del podio en favor de Dennis.
Los dos periodos de Safety Car obligaron a que la carrera se alargara durante tres vueltas. Dennis era el que tenía más energía en el grupo de cabeza, pero empezó a quedarse atrás y perdió la posición de Wehrlein. Y justo ahí fue cuando Bird comenzó a preparar su ataque, a dos vueltas para el final, con el objetivo de ganar la carrera.
Lo hizo en la última vuelta con un adelantamiento épico. Se salió de la aspiración con un movimiento arriesgado, trazó la Curva 10 por el exterior y eso le sirvió para estar por delante del que fuera su compañero de equipo en Jaguar. A partir de ahí, aguantó la batalla con Evans y cruzó la línea de meta con solo medio segundo de ventaja. Fue uno de los mejores finales de carrera de la historia de la Fórmula E y tuvo recompensa para Bird y, por supuesto, para McLaren con su primera victoria en la categoría eléctrica.
Al final, Dennis no pudo mantener la posición de podio ni tampoco Wehrlein, sino que fue Rowland quien subió al podio ‘in extremis’ para cerrar el Top 3 de una carrera apasionante en Sao Paulo.