sábado, noviembre 23, 2024
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Las cajas rurales impulsan la constitución de un «macro» SIP de estas entidades

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Las Cajas Rurales dieron este lunes un nuevo paso en la creación de una «macro» alianza en el sector con la constitución del Grupo Cooperativo Cajas Rurales del Mediterráneo (CRM), que liderará uno de los dos grandes Sistemas Institucionales de Protección (SIP) de éstas que posteriormente se unificarán. Las 72 cajas rurales pertenecientes al Grupo Caja Rural ultiman esta alianza con el fin de cerrarla en próximas semanas, como quiere el Banco de España, según señalaron fuentes financieras.

 

El primero de estos SIP es el liderado por Ruralcaja y la CRM -14 cajas rurales-, que junto a la Caja Rural de Navarra, la del Sur, la de Granada y otras 18 provinciales, entre las que se encuentra la de Jaén y representan más del 80% de los activos del Grupo Caja Rural.

 

Este proyecto es el que más posibilidades tiene para que se unan otras cajas rurales que todavía no se han decidido por una de las dos alternativas y fuentes del mercado estiman que podría rozar la cuarentena de cooperativas.

 

El segundo proyecto está conformado por otras 28 cooperativas de crédito de esta asociación y que -lideradas por la caja rural de Toledo, la rural de Canarias y la de Ciudad Real, entre otras-, representan casi el 10% de los activos de esta organización.

 

Además de estas cajas rurales, también están en ese grupo la de Gijón; Segovia; Castellón; Villarreal; Almasora; Benicarlo; La Vall San Isidro; Gissona; Vall Uxó; Vinarós; Les Coves de Vinroma; Castelldans; Almendralejo; Adamuz; Baena; Cañete de las Torres; Nueva Carteya, Utrera; Fuentepelayo; Casas Ibañez; Mota del Cuervo; La Roda y Villamalea.

 

La constitución del Grupo Cooperativo Cajas Rurales del Mediterráneo (CRM) supondrá el cierre de 29 oficinas y la supresión de 157 puestos de trabajo, que la dirección del grupo prevé cubrir con jubilaciones anticipadas.

 

Además de Ruralcaja, forman parte del CRM las cajas rurales de Torrent, Crèdit Valencia, Altea, Burriana, Callosa d’En Sarrià, Nules, Alqueries, Cheste, Alginet, Vilavella, Almenara, Xilxes y Vilafamés.

 

El SIP que han formado las entidades que integran CRM es diferente al formado por las cajas de ahorros, ya que en este caso no se crea una entidad nueva, sino que las entidades participantes escogen una cabecera, cuyos órganos de gobierno pasan a ser también los del grupo.

 

Así, las decisiones de CRM las tomará el consejo rector de Ruralcaja, que ha puesto a disposición del resto de cajas rurales un 50% de sus puestos para sus representantes.

 

Además, se ha creado una junta de cajas miembro, formada por todos sus presidentes, que tomará «decisiones relevantes en determinados aspectos, como las modificaciones del contrato o la incorporación de otras entidades.

 

Dentro del proceso de reestructuración que vive el sector financiero, estas entidades, a petición del Banco de España, se están esmerando en seguir desarrollando su operativa como funciona en los países más desarrollados en banca cooperativa, siguiendo el llamado «modelo alemán».

 

Entre los SIP que se constituyen existen los de «sentido estricto» conforme a la directiva europea, y los «reforzados o fusiones frías».

 

Las fuentes financieras consultadas destacaron que el modelo alemán implantado en el Grupo Rural es un SIP de «sentido estricto».

 

El volumen de activos del Grupo Caja Rural supera actualmente los 65.000 millones de euros, más de lo que representa IberCaja o Bankinter.

 

Las Cajas Rurales son cooperativas de crédito cuya tasa de morosidad se mantiene por debajo del 4%, mientras que la de las cajas de ahorro se situó al cierre del primer trimestre del año en el 5,35 y la de los bancos en el 5,21%, destacaron las mismas fuentes.

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