La tasa española de inflación armonizada -medida igual en todos los países de la zona euro- se situó en junio en el 1,5 por ciento, lo que supone un descenso de tres décimas con respecto a la de mayo y el octavo registro positivo consecutivo interanual, tras ocho meses de caídas.
Así lo refleja el indicador adelantado del Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) difundido este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE) que, de coincidir con la inflación general (IPC), que se conocerá el 13 de julio, también supondrá el octavo mes con tasas interanuales positivas de inflación.
Según el INE, en la tasa de junio destacó la bajada de los precios de los carburantes y combustibles y la subida de los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas.
La subida del precio de los carburantes hizo que el IPCA alcanzase una cota histórica del 5,3% en julio de 2008, pero a partir de ese mes los precios interanuales comenzaron a moderarse hasta alcanzar registros negativos por primera vez en marzo de 2009, que se mantuvieron hasta octubre.
El IPCA mide los precios de forma armonizada con el resto de los países de la zona del euro y hasta que se sepa el IPC general, el 13 de julio, el INE no dará a conocer el dato definitivo que, normalmente, no suele variar en más de una o dos décimas.
El INE elabora este indicador para incorporarlo al cálculo del IPCA en toda la zona del euro y lo difunde la oficina de estadística de la UE, Eurostat, con el objetivo de ofrecer datos equiparables a los que se elaboran en Estados Unidos.
El indicador adelantado se calcula utilizando la misma metodología que la que se emplea para el cálculo del IPC, con la salvedad de que para el primero se hace una estimación de los datos de los que aún no se dispone en el momento de la publicación.