El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso, insistió este miércoles en que Bruselas se opone al uso de las llamadas «acciones de oro», y aseguró que garantizará la aplicación de la sentencia que hará pública la justicia europea este jueves en el caso de Portugal Telecom (PT). Preguntado por los periodistas, el político portugués no quiso entrar en profundidad en el enfrentamiento entre Telefónica y el Gobierno portugués por el veto de Lisboa a la venta de la participación de PT en la brasileña Vivo.
«Mañana se va a producir la decisión del Tribunal de Justicia sobre la ‘acción de oro’ en este caso y por eso me voy a abstener de hacer más observaciones», se justificó.
Sin embargo, dejó claro que «hace ya diez años o más que la Comisión Europea considera que las acciones de oro son una violación del derecho comunitario».
«Con algunas excepciones verdaderamente excepcionales por casos de fuerza mayor, la ‘acción de oro’ es una violación del principio de no discriminación, es una violación del tratado, impide la libre circulación de capitales», subrayó.
En este sentido, recordó que fue Bruselas quien en 2005 inició un procedimiento de infracción contra Portugal por mantener sus derechos especiales en PT, al igual que ha hecho con otros siete países -entre ellos España, Francia, Alemania o Reino Unido-, por otras compañías.
«Es algo sobre todo jurídico, más que político o ideológico. Cuando hay una infracción del derecho comunitario es deber de la Comisión reaccionar», explicó.
En el caso de Portugal Telecom, Durão Barroso dijo que Bruselas esperará a que se conozca la sentencia mañana y, a partir de ahí, «aplicará esa decisión».
«Es nuestro deber el conseguir que se aplique el derecho comunitario», recordó.
Desde que el pasado 30 de junio el Gobierno portugués frenó la venta de un 30% de Vivo a Telefónica a pesar de que había sido aprobada por los accionistas de PT, la CE ya se ha pronunciado en varias ocasiones en contra de la decisión.
Bruselas mantiene desde hace años un litigio con Portugal por el caso de la empresa de telecomunicaciones, y mañana puede quedar zanjado con la sentencia que hará pública el Tribunal de Justicia de la UE.
Si confirma la opinión de su abogado general -como es habitual-, la corte con sede en Luxemburgo declarará ilegal la «acción oro» portuguesa.