El Banco Central Europeo (BCE) decidió este jueves mantener los tipos básicos de interés en la zona del euro en el 1%, un nivel mínimo histórico desde mayo de 2009 y que supone mantener la racha más prolongada sin moverlos desde la que firmó entre 2003 y 2005. La trayectoria más larga de mantenimiento de tipos desde que el BCE toma estas decisiones mensualmente se produjo cuando no los movió entre julio de 2003 y diciembre de 2005, fijados en el 2% durante 29 meses.
Los mercados habían descontado ya esta decisión, mientras que el comité de política monetaria del Banco de Inglaterra también dejó inalterada su tasa rectora en el 0,5%.
El BCE ha recortado su tasa rectora en 3,25 puntos porcentuales entre octubre de 2008 y mayo de 2009 hasta el 1%.
La mayor parte de los analistas prevé que la entidad monetaria europea dejará inalterados los tipos de interés en este nivel hasta el segundo semestre del próximo año.
La incertidumbre sobre la marcha de la economía del área euro ha obligado al BCE a frenar la estrategia de salida de las medidas extraordinarias que ha aplicado durante la crisis para facilitar liquidez a los mercados.
Así el la entidad mantuvo por 14º mes consecutivo, los tipos básicos de interés en la zona del euro en el 1%.
En EEUU los tipos se sitúan actualmente entre el 0 y el 0,25% y en Japón en el 0,1%.
Esta trayectoria de decisiones sobre tipos, que persigue apoyar la reactivación de la economía de la zona del euro, supera a la que sostuvo entre mediados de 2007 y de 2008, cuando el BCE mantuvo el precio del dinero en el 4% en 12 reuniones consecutivas.
Tras mantener en doce reuniones consecutivas los tipos en el 4%, entre julio de 2007 hasta junio del año siguiente, El BCE los subió al 4,25% y no se movieron de esa cota en las dos reuniones posteriores.
Desde octubre de 2008 ha recortado el precio del dinero en siete ocasiones, hasta totalizar 3,25 puntos porcentuales, con lo que la tasa ha pasado del 4,25% de comienzos de octubre al 1% actual.
El BCE había protagonizado un ciclo de descensos desde octubre de 2008 hasta mayo de 2009 para impulsar el crecimiento económico y contribuir a la estabilización de los mercados.
La tasa ha oscilado en sus diez años de vida entre el máximo de octubre de 2000, del 4,75%, y el mínimo histórico actual en el 1%.
En 2009 el BCE bajó los tipos en cuatro ocasiones y los aguantó en ocho en su compromiso de aportar liquidez al sistema financiero.
Desde junio de 2003 hasta octubre de 2008 el BCE había mantenido una firme política monetaria de lucha contra la inflación y no había bajado los tipos.
En septiembre de 2008, la quiebra de Lehman Brothers supuso un punto de inflexión en la política del BCE que recortó la tasa en 50 puntos básicos, desde el 4,25 al 3,75%.
Un mes después la rebaja fue también del 0,50% y en diciembre decidió reducir los tipos en 75 puntos básicos, hasta el 2,50%.
En febrero, el regulador no tocó los tipos, que había situado en enero de 2009 en el 2%, aunque en marzo, abril y mayo sí se produjeron nuevas bajadas, hasta el 1%.