La bolsa española se descolgó de la tendencia alcista de la mayoría de mercados europeos y cerró la sesión de hoy con una caída del 0,20%, arrastrada por la mala evolución de los bancos. Al finalizar la jornada, el principal selectivo del mercado español, el Íbex-35, se colocó en 10.040,80 unidades tras ceder 20,50 puntos o el 0,20%. En cambio, el FTSE 100 de Londres avanzó el 1,46%, seguido del índice milanés, con el 0,76%; del CAC-40 de París, con el 0,75% y del DAX de Fráncfort, que subió el 0,38%.
El selectivo español se dejó llevar por la apertura titubeante de la principal bolsa del mundo, Wall Street, donde se alternaron ganancias y pérdidas pese a los buenos resultados presentados por un puñado de multinacionales, a excepción de Yahoo, que decepcionó.
Entre los que superaron las expectativas de los analistas destacó Morgan Stanley, que se disparó en bolsa tras informar de que en el segundo trimestre de 2010 tuvo un beneficio de 1.960 millones de dólares, once veces más que en el mismo periodo del ejercicio anterior.
A diferencia de la mayoría de entidades financieras europeas, que se revalorizaron al calor de los buenos resultados publicados por Morgan Stanley, la banca española se anotó pérdidas del 1,33% para el Santander, del 1,09% para Banesto, del 1,05% para el Banco Popular y del 0,77% para el BBVA.
Esa caída se produjo a dos días de que se publiquen los test de resistencia europeos, cuyos resultados habrían sido ya asimilados por el mercado, que ha estado premiando mucho a la banca en las últimas semanas, según algunos analistas consultados, que también destacan el miedo a las necesidades de ayuda por parte de algunas entidades, sobre todo germanas.
Para colmo de males, la agencia de calificación de riesgos Fitch introdujo más incertidumbre en el mercado al decidir rebajar la calificación de cinco bancos portugueses para afrontar el pago de su deuda.
Frente a las pérdidas generalizadas en el sector bancario, el resto de grandes valores coquetearon con los números verdes, como demuestra la exigua ganancia del 0,03% que registró Telefónica, o las tímidas pérdidas del 0,06% de Iberdrola.
La eléctrica presidida por Ignacio Sánchez Galán anunció hoy que su beneficio entre enero y junio se situó en 1.467,2 millones de euros, el 2,6% menos que en el primer semestre de 2009, debido principalmente al descenso de las plusvalías logradas con la venta de activos.
La mayor subida del Ibex-35 correspondió a Iberia, que se revalorizó un 5,61%, después de que el Departamento de Transporte de EEUU autorizase la alianza entre American Airlines, British Airways y la aerolínea española para coordinar sus servicios internacionales.
En el extremo opuesto se colocó Grifols, con un descenso del 2,06%, seguido de Iberdrola Renovables, con el 1,77%, y de Abertis, con el 1,63%.
En cuanto al mercado continuo, La Seda de Barcelona retrocedió hoy el 7,53%, tras la fuerte revalorización experimentada desde que el lunes anunció que los bancos acreedores y varios accionistas e inversores se han comprometido a suscribir 250 millones de los 300 millones de euros de la ampliación de capital que debe realizar.
En el mercado de divisas, la moneda única europea se intercambiaba al cierre de las bolsas en el Viejo Continente a 1,282 dólares y a 111,85 yenes.