Después de dos años en crisis, los españoles han empezado a recortar el presupuesto hasta del desayuno. Croissants, ensaimadas o magdalenas brillan por su ausencia. Según una encuesta realizada por la revista Men’s Health, un 85% de los españoles desayuna en casa a diario en tiempos de crisis y se apunta a reducir el gasto, cuatro puntos por encima de quienes lo hacían hace algunos meses.
La crisis también afecta a una de las comidas más importantes del día de los españoles: el desayuno.
Hasta hace un año, el 11% de los españoles tomaba la primera comida del día en un bar o cafetería, ahora la crisis empieza a hacer mella y sólo un 8% desayuna en un establecimiento público. Las cifras del fin de semana son similares.
Antes de la crisis un 7% salía por la mañana a desayunar en una cafetería mientras que en los últimos meses ha descendido a un 5%.
Los españoles tienden a desayunar más en casa para gastar menos dinero. Así, un 85% de los españoles desayuna en casa a diario en tiempos de crisis para reducir el gasto.
Según Men’s Health, un 2% de los encuestados afirma haber cambiado sus costumbres hasta el punto de haber eliminado del desayuno la bollería en primer lugar, las galletas y embutido en segundo lugar y la fruta en tercer puesto.
Por su parte, el gasto destinado por los españoles al desayuno diario ha aumentado levemente, situándose en 1,38€.
En la capital española, desayunar un café, un zumo de naraja y algo de bollería en cafeterias o restaurantes ronda los 3,15€.
El doble cuesta en San Sebastian donde un desayuno completo cuesta, de media, 6,25€.
Aún así, alguna comunidad autónoma sigue liderando en la costumbre de desayunar fuera de casa a pesar de la crisis.
Un 21,4% de los andaluces reconoce desayunar a diario en una cafetería o un bar entre semana. Antes de la crisis esta cifra era más alta: un 25,6%.