El ministro de Fomento, José Blanco, animó este martes a comprar viviendas a todos los que estén interesados en adquirirlas, ya que a su juicio éste es «un momento óptimo» para hacerlo, y así se contribuirá a reducir el excedente de inmuebles sin vender.
En una entrevista concedida a Onda Cero, Blanco aseguró que «cuanto antes nos liberemos entre todos» del «exceso» de viviendas, «mejor será» para la economía española, porque esto repercutirá «en la fluidez del crédito».
El titular de Fomento hizo estas declaraciones después de haberse reunido con los representantes de las entidades financieras para analizar la situación del sector inmobiliario, un encuentro que está previsto que se repita este miércoles, pero esta vez con los promotores.
En cuanto a la posibilidad de que los precios continúen a la baja durante 2011, Blanco indicó que «esto lo determinará el mercado, no el ministro de Fomento» y apuntó que el valor de las viviendas se ha reducido durante tres años consecutivos «de forma considerable» en algunos lugares.
Añadió que el sector «no es homogéneo», ya que el excedente de viviendas residenciales «está concentrado» en algunas zonas del territorio español, pero en otras hay «escasez» de casas, y señaló que, aunque el precio ha bajado en algunas provincias, también ha subido en otras.
No obstante, recalcó que «nada volverá a ser lo mismo», porque, en su opinión, «el rasgo diferenciador» de la crisis que atraviesa la economía española es «la burbuja inmobiliaria que se originó a consecuencia de la Ley del Suelo» de 1998, que hizo que se construyeran «muchas más viviendas de las que se necesitan».
Según Blanco, en España se construyó una media de 700.000 viviendas al año, cuando «la digestión» del país se sitúa entre 200.000 y 250.000 inmuebles, lo que trajo consigo «un incremento exagerado» de los precios y un stock que «vamos a tardar un tiempo en digerir».
Además, destacó que la crisis inmobiliaria tiene «una repercusión muy importante» en el empleo, y apuntó que, en las zonas en las que había más construcción residencial, como Levante y Murcia, es precisamente «donde más crece el desempleo».