El plan contra el déficit con el que el Gobierno castellanomanchego pretende ahorrar mil millones de euros incluye medidas para reducir el gasto, como cerrar todas las oficinas de la Administración a las cinco de la tarde, y para aumentar los ingresos, como impuestos a los bancos y a las eólicas.
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, ha avanzado este martes en Madrid el Plan de Consolidación de las Finanzas Públicas aprobado por el Gobierno regional, detallado por la tarde en rueda de prensa por la vicepresidenta de Castilla-La Mancha, María Luisa Araújo.
El presidente castellanomanchego ha señalado que con el Plan espera ahorrar en torno a 775 millones de euros, mientras que los ingresos se van a incrementar en 200 millones de euros, aproximadamente.
Entre las medidas que tiene previsto tomar el Gobierno castellanomanchego se encuentra el cierre de «todas y cada una de las oficinas y despachos de la Administración General» de la comunidad autónoma a las cinco de tarde, así como la supresión del papel.
Araújo ha explicado más tarde que se reducirán ayudas y subvenciones por importe de 240 millones de euros, medida en la que se incluye la supresión de la dotación de 30 millones de euros para financiar gastos corrientes de los ayuntamientos y la rebaja en un 20% de la asignación a Radio Televisión Castilla-La Mancha (RTVCM).
Un 25% del ahorro provendrá de la «reprogramación» de inversiones previstas, que no se abandonan, pero sí se retrasan, como el Plan de Infraestructuras Deportivas que iba a terminar este año y aparca hasta 2013.
Para la reducción del gasto corriente en la Administración regional no se rebajará el sueldo de los funcionarios, que queda congelado, pero sí se controlará mejor su asistencia al trabajo.
Se toma como ejemplo un plan contra el absentismo laboral aplicado el año pasado en la Consejería de Educación y que en sólo tres meses permitió un ahorro de 2,5 millones de euros
También se reducirá el gasto farmacéutico, aplicando la máxima de «a igual principio activo, el medicamento más barato» y el Gobierno será «muy restrictivo» en la oferta de empleo público
En cuanto a los ingresos, se instaurará de inmediato un canon medioambiental a las productoras de energía eólica «similar» al aplicado en Galicia y con el que se quieren obtener 20 millones de euros.
También se aumentarán los tipos del impuesto existente desde el año 2000 que grava la producción de energía nuclear, el almacenamiento de residuos o la emisión de gases contaminantes y se estudiará la posibilidad de crear algún otro impuesto de fiscalidad medioambiental.
Asimismo, Castilla-La Mancha seguirá el ejemplo de Extremadura y Andalucía y gravará de forma progresiva a los bancos por los depósitos que capten en la comunidad autónoma.
Tanto Barreda como Araújo han recalcado que no se va a tocar la sanidad, la educación y los servicios sociales, ni se reducirá el empleo público ni el salario de los funcionarios.