La Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA) dice que el laudo dictado el lunes por el exministro de Trabajo Manuel Pimentel les permite recuperar derechos que «nunca debieron perder» en un Estado de derecho.
En un comunicado, USCA dice que el laudo dibuja y estabiliza el concepto de jornada laboral y pone la primera piedra a las negociaciones del futuro convenio colectivo del sector.
El sindicato señala que este laudo permite sacar del estancamiento una situación insostenible laboral y profesionalmente, y va a permitir seguir trabajando para alcanzar un acuerdo estable y duradero que equipare a los controladores españoles con sus colegas europeos.
En su comunicado, los controladores agradecen a Pimentel que reconozca las características especiales del trabajo que desempeñan los controladores aéreos en España, que en su opinión se ha negado hasta ahora.
El documento de USCA indica que, tras este dictamen, no repetirán situaciones anteriores en las que, con uso de la «fuerza», se tomaron «decisiones unilaterales contra los trabajadores», mediante «imposiciones legales de todo tipo» que sólo contribuyeron al desánimo y la confrontación.
El lunes Manuel Pimentel dio a conocer el laudo de obligado cumplimento para los controladores y AENA por el que éstos tendrán una jornada de actividad aeronáutica de 1.670 horas en 2011 y 2012, con una masa salarial de 200.000 euros de media, mientras que en 2013 trabajarán 1.595 horas, pero su salario se reducirá en la misma proporción.
Este laudo soluciona el estancamiento del segundo convenio colectivo de los controladores -que tendrá vigencia hasta el 31 de diciembre de 2013- y en cuyas negociaciones no se había logrado acuerdo alguno.
Pimentel señala en su laudo que los controladores europeos no superan prácticamente en caso alguno las 1.500 horas de actividad y la jornada de los españoles debe equipararse, a medio plazo, a la media de Europa tanto en extensión como en el binomio productividad-salario.