El principal indicador de la Bolsa española, el Ibex-35, perdía a mediodía el 0,62 % aunque se mantenía por encima de 10.100 puntos, lastrado por los bancos y los grandes valores del mercado, que acusaban aún el moderado pesimismo de la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) y de la Comisión Europea.
A las 12.00 horas el selectivo español perdía 63,40 puntos y se situaba en 10.105 unidades, con lo que el beneficio acumulado desde enero se reducía al 2,46 %. El Índice General de la Bolsa de Madrid retrocedía el 0,57 %.
Los mercados de todo el mundo acusaban lo dicho ayer por el presidente de la FED, Ben Bernanke, que admitió que la economía estadounidense no avanza al ritmo deseado. De este modo, con los futuros de los principales índice estadounidenses anticipando una apertura negativa en Wall Street, las principales plazas europeas mostraban descensos del 1,36 % en Milán; del 1 % en Fráncfort; del 0,82 % en Londres, y del 0,64 % en París.
La Bolsa española digería además las dudas expresadas ayer por la Comisión Europea, que manifestó su escepticismo acerca de la capacidad de algunas cajas de ahorros para alcanzar los objetivos de recapitalización en el plazo previsto, algo que afectaba en gran medida la cotización de los bancos.
Amadeus encajaba la mayor caída del índice, del 1,98 %, inmediatamente seguida por Bankinter, con el 1,91 %. Endesa perdía el 1,67 %; Sabadell, el 1,28 %; Popular, el 1,07 %; Inditex, el 0,89 %; Santander, el 0,88 %; Repsol, el 0,65 %; BBVA, el 0,61 %, y Telefónica, el 0,21 %.
Sólo cuatro valores lograban beneficios: Ebro (1,92 %), Mediaset (1,49 %), Grifols (0,26 %), e Iberdrola Renovables (0,13 %). Hasta las 12.00 horas el parqué español había negociado 530 millones de euros, de los que 93 correspondían al Santander, 84 a Telefónica, y 57 a BBVA.
En el mercado de divisas, el euro permanecía estable en 1,467 dólares en su cambio frente a la moneda estadounidense.