El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha elogiado este viernes la llamada de la UE a la oposición griega para que apoye el plan de austeridad en su país, a la vez que ha reprochado al PP la falta de responsabilidad que, en su opinión, ha demostrado ante la crisis. En la rueda de prensa al terminar la reunión del Consejo Europeo, Zapatero ha defendido el apoyo dado a Grecia por los Veintisiete y se ha mostrado convencido de que el Parlamento de este país aprobará el nuevo plan de austeridad.
No ha querido responder directamente a la pregunta de si el Partido Popular debe darse por aludido después de que los jefes de Estado y de Gobierno de la UE hayan pedido expresamente a la oposición griega que lo respalde. Pero sí ha realizado una serie de reflexiones en las que ha lamentado la actitud del partido liderado por Mariano Rajoy.
En esa línea, ha recordado que, aunque no de forma tan expresa como se ha hecho ahora con Grecia, el Consejo Europeo ya hizo llamamientos a las oposiciones de algunos países, como Portugal, para trabajar de forma conjunta hacia la salida de la crisis. «La reflexión es evidente: a más crisis, más responsabilidad; cuantas más dificultades que son objetivamente globales y extendidas y que es poco sostenible que se deban a la actuación de un Gobierno o de otro, más se debería de tener una actitud de respaldo», ha recalcado.
Fortaleza económica española
Para Zapatero, que España recupere su fortaleza económica es «una cuestión de país» que está por encima de los colores y las siglas políticas. De ahí que haya dicho que le habría gustado que el PP hubiera apoyado las reformas económicas imprescindibles y que ha recordado que él ya dijo que estaba dispuesto a hacer costase lo que le costase.
«Cada uno interpreta su responsabilidad con su país y me habría gustado ver al PP y a Rajoy asumiendo esas responsabilidades y no en la facilona tarea de votar en contra y de decir que el responsable es el Gobierno», ha añadido. Además, ha lamentado que en esta etapa difícil, su Gobierno esté trabajando en medio de «una desconfianza excesiva de los mercados y el lógico descontento de los ciudadanos» y a ello se sume el «muy poco compromiso de la oposición».
El presidente del Gobierno ha confiado totalmente en que Europa va a seguir apostando «con toda firmeza y convicción» por la estabilidad griega. Al referirse a la exposición de las entidades financieras españolas en Grecia, ha asegurado que esa es muy baja, pero ha recordado que, no obstante, la vicepresidenta segunda del Gobierno, Elena Salgado, se reunió esta semana con representantes de las mismas.
Tratado de Schengen
Zapatero se mostró este viernes de acuerdo en que la UE introduzca restricciones en la libre circulación de personas por el territorio comunitario ante situaciones que exijan «respuestas excepcionales». En la rueda de prensa posterior al Consejo Europeo de Bruselas, Zapatero dio su beneplácito a la reforma del Tratado de Schengen promovida por Francia e Italia ante la avalancha de personas huidas de Túnez y Libia por las revueltas.
Aunque en un principio España se había opuesto a cualquier retoque de las reglas que rigen la libre circulación de personas en la Unión Europea (UE), Zapatero aceptó la «razonabilidad» de introducir más mecanismos de control en las fronteras exteriores ante escenarios de extrema gravedad. Entre esas causas, el jefe del Ejecutivo español citó el caso de un desplazamiento masivo de inmigrantes por una gran catástrofe.
También ofreció otros ejemplos -«póngale a la catástrofe el apellido que quiera», dijo- que podrían justificar medidas de refuerzo, como «un acto de terrorismo, una guerra o una pandemia».
En su opinión, estas hipotéticas situaciones se deben «ordenar y racionalizar» sin que se perjudique la circulación de las personas.
«Son circunstancias muy excepcionales que, por ser excepcionales, es razonable que exijan respuestas excepcionales en el marco Schengen, que sea acordado con todas la garantías y no afecte al libre tránsito de ciudadanos», explicó.
Remarcó que «es un recorrido que se puede apoyar porque respeta el espíritu y el principio de libre circulación». Zapatero reconoció que algunas experiencias ya vividas hacen aconsejable «ordenar y racionalizar» casos de especial gravedad.
Garantizó que el mecanismo de salvaguarda consensuado entre los veintisiete miembros de la UE no podrá ser utilizado «en ningún caso» para restringir «de forma arbitraria» la libertad de movimiento. «Nuestra posición, a día de hoy, es de tranquilidad sobre cómo ha quedado el texto», resumió Zapatero al cierre de la cumbre.
Estrella Digital/Efe