El PSOE se ha propuesto garantizar los recursos y mecanismos de actuación disponibles en materia de políticas de empleo mediante la creación de un Fondo para el Empleo que permitirá sostener las «medidas extraordinarias» que se proponen abordar si ganan las elecciones generales.
Dicho instrumento contará con los «ingresos de naturaleza tributaria y presupuestaria que específicamente se determinen», pero también tendrá como fuente de financiación las aportaciones de aquellas grandes empresas con beneficios que impulsen expedientes de regulación de empleo para despedir a trabajadores mayores de 50 años.
Así consta en el programa electoral con el que Alfredo Pérez Rubalcaba concurrirá a los comicios del próximo 20 de noviembre, que explica que la nueva herramienta tendrá «naturaleza suplementaria y no sustitutiva» respecto a los actuales fondos ordinarios que se destinan en los Presupuestos Generales del Estado a las políticas de empleo.
El objetivo de los socialistas en «aumentar los recursos de los Servicios Públicos de Empleo» y mejorar su eficacia, así como adoptar «nuevos instrumentos que hoy no existen», impulsando también la colaboración público-privada en la intermediación en el mercado laboral.
La obligación para que las grandes empresas con beneficios que prejubilen compensen al Estado fue introducida en la reforma de las pensiones y entró en vigor con efectos del 27 de abril, después de que Telefónica anunciara un ERE para 6.500 trabajadores en el periodo 2011-2013.
La compañía que preside César Alierta se comprometió a abonar en su totalidad el coste por desempleo del proceso, cifrado en 350 millones de euros. El Ministerio de Trabajo autorizó el proceso el pasado mes de julio.
La norma plantea que las empresas que, pese a haber tenido beneficios en los dos últimos años, realicen un ERE que afecte a trabajadores mayores de 50 años deberán efectuar una «aportación económica» al Tesoro Público para compensar el impacto que ello supone en el sistema de protección por desempleo, si bien nunca se concretó de qué manera se aplciarían estos recursos.
Para el cálculo de la aportación económica se tomarán en consideración el importe de las prestaciones y subsidios por desempleo de los trabajadores de 50 o más años afectados por el expediente de regulación de empleo, incluidas las cotizaciones a la Seguridad Social realizadas por el Servicio Público de Empleo Estatal.
Por otro lado, los socialistas se comprometen a reordenar las ayudas a la contratación para primar los contratos que supongan incremento del empleo en la empresa, crear bonificaciones en las cuotas de Seguridad Social que se proyecten en el tiempo a cambio de asegurar el mantenimiento por varios años de los contratos y posibilitar e incrementar la formación.
Desincetivar temporalidad
El programa electoral de Rubalcaba contempla además atajar la temporalidad del mercado laboral, para la que introducirá un nuevo modelo de cotización por desempleo, denominado ‘bonus-malus’, con el fin de desincentivar la «temporalidad excesiva».
Esta medida incrementaría la cotización a la Seguridad Social que los empresarios deben abonar para los contratos temporales, en tanto que llevaría aparejada una reducción de los cuotas sociales para aquellos indefinidos.
Para fomentar la contratación a tiempo parcial, muy poco recurrida por el empresario español pese a las bonificaciones, el PSOE cambiará la regulación para que los parados puedan suplir los trabajadores en activo durante los períodos en los que éstos reciban formación continua.