El Tesoro volverá a someterse al escrutinio de los mercados esta semana con emisiones de letras y bonos, en las que intentará captar un máximo de 9.500 millones de euros, tras el éxito de la primera subasta y pese a la rebaja de calificación de Standard & Poor’s.
Mañana realizará una primera emisión de letras en la que espera captar hasta 5.000 millones y el jueves una segunda en la que intentará colocar hasta 4.500 millones en bonos con vencimiento a 31 de octubre de 2016, obligaciones con vencimiento a 30 julio de 2019 y obligaciones con cupón 5,85% a pagar el 31 de enero de 2022.
La emisión del martes será de letras a 12 y 18 meses, un tipo de papel que no emite desde el pasado 13 de diciembre, cuando colocó casi 5.000 millones a tipos considerablemente más bajos después de que en el mes de noviembre llegaran a superar el 5%.
La subasta del 13 de diciembre fue la primera en la que el Tesoro superó sus objetivos de emisión, algo que repitió en la última emisión de 2011 y en la primera de 2012, cuando el equipo de Mariano Rajoy ya había llegado a la Moncloa y había anunciado sus primeras medidas.
De hecho, en esa emisión, el Tesoro colocó casi 10.000 millones, el doble de lo previsto, en bonos a tres y cuatro años gracias a la moderación de los tipos de interés y a la alta demanda.
Así, la subasta del martes será la primera tras el éxito del pasado jueves, aunque también desde que Standard & Poor’s decidiera realizar una rebaja de notas generalizada que afectó a nueve países de la eurozona.
De hecho, España sufrió una rebaja de dos escalones, mientras que otros países como Francia y Austria perdieron la triple A. Alemania, Finlandia, Luxemburgo y Países Bajos se salvaron de la rebaja y lograron mantener la máxima nota.
Algunos analistas achacan la buena racha del Tesoro al miedo a que lleguen tiempos peores y otros lo limitan a la intervención del Banco Central Europeo (BCE) desde que en diciembre decidiera ofrecer financiación ilimitada a las entidades europeas.
Una subasta más en enero
De cara a las emisiones de esta semana que viene, los analistas dicen que es difícil hacer previsiones porque no se entiende bien el cambio tan brusco que ha vivido el Tesoro, que en noviembre tuvo que elevar los tipos a máximos y que ahora puede sacar al mercado el doble de lo previsto.
En el mes de enero, realizará una emisión más el día 24 (letras a 3 y 6 meses). A lo largo de 2012, el Tesoro emitirá 86.000 millones de euros brutos en deuda a medio y largo plazo, un 10% menos que en 2011, cuando se emitieron 95.600 millones brutos. La emisión neta se situará en 36.000 millones de euros, frente a los 48.600 millones de euros de 2011.