El presidente francés, Nicolas Sarkozy, anunció este domingo una subida del IVA después del verano, una tasa a las transacciones financieras y el inicio desde este lunes de negociaciones sobre un «contrato de competitividad» que supondrá el final efectivo en Francia de la semana laboral de 35 horas.
Sarkozy anunció, en una entrevista en directo desde el Elíseo y difundida en nueve canales, una subida del IVA a partir de octubre desde el 19,6% actual hasta un 21,2 por ciento, un alza de 1,6 puntos. El presidente asegura que la impopular medida no producirá un incremento de los precios, ya que “la competencia los mantendrá».
Sobre la tasa a las transacciones financieras, Sarkozy explicó que «desde hace tres años las finanzas se han comportado de una manera loca, desregulada. Es normal que las transacciones participen en el reembolso de los déficit». La tasa, de un 0,1 %, se empezará a aplicar a partir de agosto y espera que el resto de países de la eurozona adopten una medida similar.
El objetivo de ambas medidas es “ relanzar el empleo y la competitividad de las empresas francesas».
El presidente francés anunció una polémica derogación efectiva de la semana laboral de 35 horas, a través de un «contrato de competitividad» que permitirá a los empresarios adaptarse a las necesidades del mercado, de tal forma que las empresas con problemas podrán aumentar el horario de trabajo sin que ese aumento implique un alza de los salarios
El primer ministro, François Fillon, será el encargado de preparar desde este mismo lunes los contactos que lleven a ese contrato que «se impondrá a la ley y a los acuerdos individuales”.
«Las medidas tomadas han permitido estabilizar las cosas. Se han sentado las bases para la estabilidad financiera del mundo y de Europa», concluyó Sarkozy.