El presidente del Banco Santander, Emilio Botín, ha asegurado que la razón por la que el crédito no fluye en España es por la falta de demanda solvente. Botín, optimista por los resultados positivos del banco en 2011 (5.351 millones de euros de beneficio de los que 54% vienen de Brasil, México, Chile, Argentina y Polonia), confía en la reforma financiera y laboral del Ejecutivo de Rajoy para generar confianza y liquidez: «Las medidas del Gobierno están en la buena dirección». El presidente del primer banco español ha asegurado que el país necesita «una reforma laboral de calado que dé confianza al empresario y que dé empleo», entonces así el crédito fluirá. «Cuando haya confianza, habrá demanda de los empresarios», ha aclarado.
No ha querido hacer ningún comentario acerca de las declaraciones de Mariano Rajoy que los micrófonos captaron este lunes sobre una posible huelga general tras la reforma laboral: «No entro en la huelga general, hace falta una reforma porque yo creo que es lo que le conviene al país».
Respecto a la reforma financiera asegura que cree que van a quedar bastantes menos entidades tras las fusiones, aunque no se arriesga a decir el número. «Sobre las fusiones y restructuraciones del sistema financiero yo aconsejo seguir haciendo lo mismo que se ha hecho hasta ahora pero más deprisa. Terminarlo cuanto antes, como dice Rajoy, para junio». El banco Santander no tiene ningún plan de adquirir ningún banco, aunque reconoce que mantiene conversaciones con una entidad de Polonia.
Sobre la crisis española, asume errores: «Hubiéramos prestado menos en el inmobiliario». Aunque cree que concretamente el Santander ha tenido muy poca culpa: «Hemos pagado los impuestos, no hemos tenido ayudas. Hay bancos y bancos. Hay que culpar a los políticos que no han sabido manejar el tema». También discrepa de la actuación de Europa, criticando que está siendo bastante lenta por lo que no está «nada satisfecho».
5.351 millones de euros de beneficios en 2011
Antes de dar un repaso a la situación económica y financiera del país, Emilio Botín reunía a toda la prensa en la Ciudad Financiera del Banco Santander para presentar los resultados económicos de 2011. En total el banco se ha embolsado 5.351 millones de euros, de los que más del 54% provienen de países emergentes como Brasil, México, Chile, Argentina y Polonia. El 46% restante de los beneficios llegan de España, Reino Unido, Portugal, Alemania y EEUU.
Aunque la entidad siga teniendo beneficios, la cifra total supone un 35% menos que la obtenida en 2010. La razón la señala en el débil crecimiento de la actividad, la inestabilidad de los mercados y las medidas y cambios regulatorios de gran calado.
Botín ha explicado que el beneficio recurrente del banco en 2011 ha sido de 7.021 millones de euros, pero que lo obtenido en el cuarto trimestre (1.812 millones de euros) se ha destinado a saneamientos brutos no exigibles para sus activos inmobiliarios. «Así nos hemos adelantado a los requerimientos de provisiones adicionales para el sistema financiero anunciados por Rajoy y también nos permite subir la cobertura de los inmuebles adjudicados en España al 50%».
Otra de las razones por las que el presidente del Santander considera que se ha cerrado un año muy bueno es porque han conseguido con seis meses de adelanto las exigencias establecidas por la EBA (Autoridad Bancaria Europea), alcanzando un core capital del 9%.
Finalmente ha señalado la tercera buena noticia del cierre del año, siendo ésta que la liquidez del banco ha alcanzado un ratio de créditos sobre depósitos del 117%.
A esto, hay que añadir que el banco ha mantenido una retribución a los accionistas de 0,60 euros por acción por tercer año consecutivo, tal y como anunció en junio del año pasado.
La situación del grupo Santander en España
Los negocios del Banco Santander en España alcanzaron un beneficio de 1.149 millones de euros, una reducción casi de dos tercios en comparación con los 3.600 millones que ganaron en 2008. «Antes España suponía el 34% de nuestro beneficio», ha recordado Emilio Botín.
El desapalancamiento de las familias y de las empresas relacionadas con la promoción inmobiliaria y la construcción, la persistencia de la crisis que incide en la morosidad, el cierre de los mercados mayoristas de crédito y las presiones de liquidez y, finalmente, las dificultades del sector inmobiliario han sido las principales causas de no obtener un mayor beneficio de nuestro país. Ante esto, Emilio Botín ha querido justificar y aclarar que no prestan más porque no hay demanda solvente.
A pesar de la situación de España, ha asegurado que ellos no han reducido empleo ni han cerrado ninguna de las oficinas del país.
Respecto a su exposición inmobiliaria, dice que asciende a 32.100 millones de euros, cifra que ya se ha visto reducida en 10.400 millones de euros desde diciembre de 2008 (el 14% de su cartera inmobiliaria total en España).
Finalmente Botín ha hecho mucho hincapié en que su fortaleza de ingresos permite generar casi 25.000 millones de euros de beneficio operativo antes de provisiones, lo que sitúa al Santander entre los primeros bancos del mundo por capacidad de generación de resultados. «Cuando estemos en circunstancias normales, imagínense lo que será el grupo Santander», ha concluido.
Eva Díaz