Desayuno económico del Fórum Europa el de este miércoles en el Hotel Ritz y la protagonista, como era de esperar, ha sido una cifra, la del 8,51% de déficit que el Gobierno anunciaba el pasado lunes. El invitado esta vez era Joaquín Almunia, vicepresidente de la Comisión Europea y comisario de Competencia.
Preguntado por si es posible que Bruselas flexibilice el objetivo déficit situado en el 4,4%, Almunia ha incidido en la «necesidad» de que la CE conozca las «razones» que han provocado la desviación del déficit, -del 6% al 8,5%-, los Presupuestos Generales del Estado para 2012, «con sus ajustes y sus gastos», así como la información relativa a los presupuestos de las Comunidades Autónomas.
El vicepresidente de la CE ha indicado que una vez que tengan los datos, Eurostat ha de ofrecer, en el mes de abril, las cifras del cierre de 2011 y en el mes de mayo, la CE presentará sus recomendaciones para cada Estado miembro. «Hasta que no haya un volumen de información, la Comisión no puede hacer nada», ha señalado.
Almunia dice ser «consciente» del debate suscitado en torno al objetivo de déficit y está de acuerdo en que conviene «discutir» sobre la modificación, pero ha pedido que haya «menos titulares» en los medios.
De hecho, el exsecretario general del PSOE ha negado que fuera él quien filtrara a la agencia Reuters que Europa no creía los datos de déficit presentados por el Gobierno de Mariano Rajoy. «Vi la noticia de Reuters, pero no sé de dónde salió eso. Desde luego, no salió de un comisario que por ser español sabía bastante más que el resto de mis colegas», apuntó.
Defensa del euro
Durante su intervención, Joaquín Almunia ha hecho una férrea defensa del euro y la unión monetaria europea. «Ni siquiera Grecia tiene alternativa fuera del euro», ha remarcado. «Si la puerta de la eurozona se abriera, no habría quien pudiera cerrarla. Sería el principio de un proceso dolorosísimo». ahora bien, para que la moneda única salga adelante e indemne, el comisario de competencia defiende reformas: una agenda digital, hacer una política industrial moderna, apoyar la I+D+I, eliminación de las barreras para los inversores pequeños, «para que puedan convertirse en mayores» o la creación de un mercado interior de la energía son algunas de las apuestas de Almunia. Otras ya se han puesto en marcha, como la reforma financiera. Si bien, es necesario tener «demanda interior».
Del mismo modo, el vicepresidente de la CE asegura que los estados miembros han de hacer un frente común porque «o salimos juntos de ésta o no salimos». Por eso defiende la cesión de soberanía por parte de los países. «Estamos obligados a hablar de la calidad democrática de la Unión Europea».
El papel de las agencias de calificación
Por otro lado, el vicepresidente de la Comisión Europea ha señalado que el papel de las agencias de rating está «muy por encima de lo que se merecen» porque el estado de las cuentas de las administraciones públicas lo conocen las propias instituciones y, en la mayoría de los casos, «no les piden a las agencias que califiquen su deuda». Teniendo esto en cuenta, Almunia asegura que no tenemos por qué «basar» nuestras previsiones en lo que digan.
El ministro de Exteriores, José Manuel García Margallo, ha sido el encargado de presentar a Joaquín Almunia, quien ha estado apoyado por varios políticos socialistas como Jordi Sevilla, Cristina Narbona, Pedro Solbes, Soraya Rodríguez, Carmen Alborch, Ramón Jáuregui o Diego López Garrido, así como por el presidente del Congreso, Jesús Posada, o la exministra de Aznar, Elvira Rodríguez.
Cristina Rodríguez