El Ibex 35 se ha desplomado un 3,58% al cierre de mercado y ha abandonado la cota de los 7.300 puntos, después de una jornada con las dudas sobre España disparadas, que llevaban la rentabilidad del bono español a 10 años a cerca del 6%. En la semana, el selectivo perdió un 5,3% y se atascó en mínimos de marzo de 2009, en los 7.250,6 enteros.
El mismo día en que se conocía que la deuda de las entidades españolas con el BCE se anotó una cifra récord de 227.600 millones de euros en marzo, BBVA se precipitó un 3,13% en bolsa y Santander, un 2,99%.
Tampoco ayudaron el resto de ‘pesos pesados’ del selectivo, pues Repsol cedió un 2,73%, con el conflicto diplomático entre España y Argentina por YPF como telón de fondo. Telefónica cayó un 2,97% e Iberdrola perdió un 2,82%. Pero fue Abengoa el componente que lideró los recortes, al hundirse un 6,01%.
Sin ningún valor en positivo, el Ibex se volvió a erigir como el parqué del Viejo Continente con mayor caída, sólo seguido de cerca por Milán, que retrocedió un 3,4%.