El Tesoro Público ha colocado 1.932,95 millones de euros en letras a tres y seis meses, aunque ha tenido que subir considerablemente los tipos para cerrar con éxito la emisión.
De esta forma, el organismo se ha quedado en la parte alta del rango, ya que esperaba captar entre 1.000 y 2.000 millones de euros, un objetivo menor que el de subastas anteriores. La demanda, por su parte, se ha mantenido fuerte y ha superado los 9.400 millones.
En concreto, el Tesoro ha colocado 724,561 millones en letras a 3 meses de los 5.510,94 millones solicitados por los inversores. De esta forma, las peticiones han superado en 7,6 veces la oferta frente al ratio de 3,5 veces registrado en la subasta anterior.
El tipo de interés medio, por su parte, se ha elevado al 0,634% en las letras a 3 meses desde el 0,381% anterior, mientras que el marginal ha escalado al 0,720% desde el 0,423% de la subasta del 27 de marzo.
Además, el organismo ha colocado 1.208,34 millones en letras a 6 meses de los 3.927,45 millones pedidos por el mercado, de forma que las solicitudes han superado en 3,3 veces lo que finalmente se ha colocado, menos que en la subasta anterior, cuando el ratio de cobertura fue de 5,6 veces.
El tipo medio, por su parte, se ha elevado al 1,580% en las letras a seis meses desde el 0,836% registrado en la subasta de marzo, mientras que el interés marginal ha escalado al 1,628% desde el 0,868% de la emisión anterior de este tipo de papel.
La emisión de este martes se ha producido en una situación de tensión en los mercados, dado que la incertidumbre ha situado al Ibex por debajo de los 7.000 puntos, mientras que la prima de riesgo ronda los 430 puntos básicos.
Además, el Banco de España confirmó ayer la entrada de la economía española en recesión, con una ralentización de las exportaciones, lo que ha podido trasladar mayor miedo a los inversores.
Con esta última subasta de abril, el Tesoro da por cerrado un mes complicado, con vencimientos por valor de 21.497 millones (9.558 millones en letras y 11.939 millones en bonos), según datos del mercado primario.
No hay problemas de tesorería
Ante la posibilidad de que los objetivos de esta subasta hayan podido parecer bajos a ojos de los mercados –son 1.000 millones menos que en la última subasta de este papel–, fuentes del Ministerio de Economía explicaron que la razón fundamental de la emisión es mantener los compromisos con todos los tramos de deuda y no captar más financiación.
Así, las mismas fuentes precisaron que «las emisiones a corto plazo no aportan financiación neta al Estado, puesto que vencen en el mismo año», sino sólo un colchón adicional de tesorería». Además, aseguraron que en estos momentos «el Tesoro no tiene necesidades de liquidez» después de las sobreemisiones llevadas a cabo en el primer trimestre aprovechando la fase bajista de los tipos.
En cualquier caso, el Tesoro ha vuelto a superar un examen en los mercados, tal y como ocurrió el pasado jueves 19 de abril, cuando logró captar más de lo previsto, 2.541,06 millones, en bonos y obligaciones, aunque tuvo que elevar la rentabilidad del papel a diez años al 5,743%.
En la misma línea, la subasta de letras a 12 y 18 meses del martes anterior se saldó con la emisión de 3.177 millones de euros en letras a 12 y 18 meses, por encima del máximo de 3.000 millones, aunque a un precio que duplicó el de la subasta anterior de este papel.
En cualquier caso, el Tesoro ha emitido ya más de 60.000 millones de euros en lo que va de año, las dos terceras partes de los 86.000 millones de euros brutos que espera colocar en deuda a medio y largo plazo en 2012.
En el conjunto de 2012, el organismo tiene que afrontar vencimientos por valor de 130.344 millones de euro, una cantidad un 8,6% superior a la de 2011, cuando la cifra rondó los 120.000 millones.