El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, viaja a Bruselas para participar en el Consejo Europeo con la esperanza de que la UE dé un mensaje político contundente que proteja el euro, y de que el lunes los mercados den un respiro a España y a la deuda soberana.
La cumbre comenzará esta tarde, pero antes Rajoy se reunirá con los líderes del Partido Popular Europeo.
El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, que ayer garantizó a Rajoy su apoyo, también participará en el encuentro que celebrarán esta mañana los socialistas europeos en la capital belga.
España quiere que en la cumbre se fije un calendario claro y con etapas concretas para avanzar hacia la unión bancaria y la integración fiscal, pero Rajoy dejó ayer claro, en el pleno del Congreso, que lo prioritario es lograr la estabilización de los mercados.
«El tema más urgente es la financiación: no podemos durante mucho tiempo financiarnos a precios como al que nos estamos financiando en estos momentos; hay muchas instituciones, y también entidades financieras, que no pueden acudir a los mercados», ha manifestado.
Avanzó su intención de instar a la UE a utilizar «los instrumentos comunitarios» que están ahora disponibles para calmar a los mercados, aunque no precisó si pedirá que actúe el Banco Central Europeo o los fondos de rescate en apoyo a la deuda soberana y a los bancos.
En cualquier caso, en opinión del Gobierno, lo fundamental es que se adopten decisiones que sean «rápidas, ágiles, contundentes y entendibles».
Además de la unión fiscal y bancaria, Rajoy defenderá la necesidad de seguir reduciendo el déficit público, continuar con las reformas estructurales y profundizar en el mercado interior.
Reclamará asimismo la ampliación del capital del Banco Europeo de Inversiones (BEI), el lanzamiento de bonos de proyecto para financiar infraestructuras y la utilización de fondos estructurales para las pymes.
El Consejo continuará mañana viernes y, al concluir, Rajoy participará en el almuerzo que compartirán los líderes de la zona euro.