El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha avanzado que el déficit del Estado en términos de Contabilidad Nacional se situó «en el entorno del 4% del PIB, un poquito más», pero ha precisado que este saldo está «inflado», de modo que una vez descontadas las transferencias a otras administraciones o a la UE, que equivalen a unos 15.000 millones de euros, el déficit en términos homogéneos quedaría reducido al 2,5% del PIB.
Montoro, que ha dado a conocer estos datos en rueda de prensa tras presidir la Comisión Nacional de la Administración Local, adelantando los resultados que estaba previsto dar a conocer mañana, indicó que las cifras en términos homogéneos, más las últimas medidas de ajuste adoptadas en el mes de julio, «garantizan la consecución del déficit público de la administración del Estado para 2012».
Si bien, según lo dicho por la secretaria de Estado de Presupuestos, Marta Fernández Currás, en términos de Contabilidad Nacional el Estado se habría sobrepasado el límite previsto para este año. Currás ha dicho que el objetivo de déficit del Estado para 2012 se mantendrá en el 3,5% del PIB y no se elevará hasta el 4,5%, pese a que para el conjunto de las administraciones públicas se ha incrementado este límite del 5,3% al 6,3% del PIB este año tras la relajación de los objetivos permitida por la UE.
En su lugar, ha asegurado que «la relajación de la senda hasta 6,3% del PIB se aplicará a España como Estado en su conjunto, sin que exista relajación en ninguno de sus subsectores para tener garantía de absoluto cumplimiento con Bruselas».
En cualquier caso, este déficit del Estado en términos de Contabilidad Nacional, que superaría el 4%, supone un incremento de algo más de medio punto porcentuales respecto al déficit registrado hasta mayo, que se situó en el 3,41% del PIB, con 36.364 millones de euros. En cambio, si se toma la ejecución presupuestaria de la administración central en términos homogéneos, el saldo negativo se habría contenido, al situarse en el 2,5% del PIB tras el 2,38% registrado hasta el mes de mayo.
Los ayuntamientos se comprometen
Por otro lado, Montoro ha destacado que los ayuntamientos se han comprometido con los objetivos de déficit y deuda para 2013, que fijan un déficit cero y un nivel de endeudamiento del 3,8% del PIB para el próximo año.
El ministro de Hacienda ha recalcado que este compromiso con la senda del déficit es «fundamental» para acabar cuanto antes con la recesión y permitir una «adecuada» financiación, a lo que añadió que su departamento ha insistido a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) de la necesidad de «seguir con sus esfuerzos y con el plan de eliminación de las entidades públicas que no tienen ningún sentido».
En cuanto a las comunidades autónomas, que tienen un objetivo de déficit del 1,5% en 2012, desde el Ministerio de Hacienda se asegura que «los riesgos permanecen hasta que se cierra el ejercicio». «Estamos encima de ellas para que se lleven adelante las medidas una por una concretas», ha señalado Montoro, para añadir que «si es necesario haremos apercibimiento público». «Hace falta que no lo necesitemos y de ahí nuestra presión», apostilló.
La FEMP resalta los esfuerzos de los ayuntamientos
Por su parte, el presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), Íñigo de la Serna, ha subrayado los esfuerzos de las entidades locales por cumplir con los objetivos de déficit y estabilidad presupuestaria, convirtiéndose en «la única administración» que está haciendo frente a los objetivos acordados.
Según ha reconocido, los objetivos para los próximos años son «muy estrictos», pero ha explicado que los ayuntamientos seguirán por la misma senda de «austeridad» para hacerlos realidad. «Estamos comprometidos con la sostenibilidad de nuestras finanzas y también con las finanzas del país», ha afirmado.
Sin embargo, ha pedido que las entidades locales tengan «cierta flexibilidad» para hacer frente a situaciones extraordinarias a las que tengan que hacer frente, igual que ya tienen el Estado y las comunidades autónomas.