El empresario multimillonario estadounidense George Soros apremia a Alemania a que lidere la salida de la eurozona de la crisis o que abandone la moneda única europea. Es más, afirma que la situación actual del euro sería mejor sin Alemania.
En una entrevista concedida al diario británico ‘Financial Times’ que se publica este lunes, Soros urge al Gobierno de la canciller alemana, Angela Merkel, a que impulse una agenda por el crecimiento económico, acelere en el establecimiento de una autoridad fiscal europea y que garantice la creación de los eurobonos.
Como alternativa a todas estas medidas, Soros solo avista una salida del euro de Alemania. «Lidera o abandona: esta es la decisión legítima que Alemania tiene que tomar».
«O supeditas su destino al del resto de Europa, te arriesgas a hundirte o nadar juntos, o abandonas el euro, porque si (Alemania) hubiera abandonado (el euro), los problemas de la eurozona habrían mejorado», sentencia Soros.
El hombre que ganó parte de su fortuna en apostar en 1992 por la devaluación de la libra esterlina, desatando una crisis especuladora contra el Banco de Inglaterra, deposita en Alemania el destino de la eurozona.
«Depende totalmente de la actitud de Alemania», subraya, «si insisten en una política de austeridad, de reforzar la actual fase deflacionaria y no se mueven de ahí, entonces, de hecho, sería mejor que, a largo plazo», abandonen la zona euro.
Aclara, sin embargo, que la solución por la que aboga es que Alemania abandone la vorágine deflacionaria, que cambie su postura, se comporte como un «líder supremo benévolo» para con los demás socios europeos. «Una vez vean los costes (del viraje político), quizá quieran continuar» en la zona euro, añade.
«Si no cambian su punto de vista sobre el euro, estarán empujando a Europa, sin pretenderlo, hacia una situación intolerable», argumenta Soros, que vaticina que el fracaso del proyecto europeo llevaría al Viejo Continente a una coyuntura económica peor a la de sus orígenes.
Comprar bonos
Soros, que se ha postulado como un firme partidario de una mayor integración europea a todos los niveles pero un ferviente crítico de la gestión de la crisis realizada desde Berlín, aplaude el programa de compra de bonos aprobado por el Banco Central Europeo (BCE), con el único voto en contra del Bundesbank, el banco central germano.
Ensalza esta decisión, «más poderosa que las anteriores», y asegura que «surtirán efecto». «Podría incluso asentar el terreno para una solución final, pero es un recurso provisional, no una solución», aclara Soros.
En este sentido, Soros ahonda que la mera atisbo de intervención por parte del BCE debe provocar el descenso de la prima de riesgo de la deuda española, aunque no corta la espiral deflacionista. No obstante, no espera que España pida el rescate para validar la compra de bonos hasta que «tenga la espalda contra la pared».
A su juicio, los recortes tampoco son la solución a la crisis, sino un elemento que exacerba la división de la eurozona entre deudores y prestamistas, que apuntala «una Europa de dos niveles».
Esto solo conduce hacia una quiebra del euro, del mercado único y de la Unión Europea (UE), ha apuntado en anteriores ocasiones.