El Tesoro Público ha llegado a un acuerdo con varias entidades de crédito para conceder un préstamo de 8.000 millones de euros destinado a la financiación de parte del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA).
Según ha informado el Ministerio de Economía y Competitividad en una nota, el crédito se estructurará como una colocación privada de bonos del Tesoro a un grupo de entidades que se desarrollará en dos fases.
En la primera, se obtendrán 3.000 millones de euros a través de una emisión que se celebrará a finales de septiembre. El segundo desembolso, de 5.000 millones, tendrá lugar a mediados de octubre.
El fondo autonómico es un instrumento diseñado por el Gobierno para atender las necesidades de financiación de aquellas comunidades que han dicho que no podrán hacer frente a los vencimientos pendientes.
Estará operativo a finales de septiembre o principios de octubre y contará con una dotación total de 18.000 millones. Los bancos, a través de este crédito, aportarán 8.000 millones, mientras que Loterías y Apuestas del Estado (LAE) pondrá 6.000 millones y el Tesoro hará un desembolso propio de los 4.000 millones restantes.
Con el crédito acordado entre el Tesoro y las entidades financieras, el Gobierno cree que se da un paso más en la dotación del FLA, un instrumento que servirá para garantizar la sostenibilidad de las cuentas de las comunidades y que contribuye a lograr los objetivos de déficit.
Cataluña, Murcia y Comunidad Valenciana
Hasta ahora, tres comunidades han declarado formalmente que acudirán al fondo y las ayudas que solicitarán las tres suman más de 8.800 millones de euros. En concreto, Cataluña pedirá algo más de 5.000 millones, la Comunidad Valenciana unos 4.000 y Murcia más de 640 millones.
A pesar de que estas tres comunidades agotarían casi la mitad del fondo de que otras sopesan pedir asistencia financiera, Hacienda, de momento, no se plantea elevar la cuantía del mismo.
Las comunidades que decidan adherirse al fondo tendrán que cumplir unos estrictos condicionamientos presupuestarios y financieros, además de presentar al Gobierno un plan de ajuste e informarle puntualmente de sus correspondientes ejecuciones presupuestarias.
Parece que el Tesoro está aprovechando el efecto que está produciendo el anuncio por parte del Banco Central Europeo (BCE) de un nuevo programa de compra ilimitada de bonos en los mercados, que ha permitido que la prima de riesgo se quede en el entorno de los 400 puntos básicos.
De hecho, esta misma semana, el organismo cerró otra emisión privada de 6.000 millones en letras y bonos para reforzar los recursos del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) y que éste, a su vez, pudiera realizar una inyección de capital al grupo BFA-Bankia.