El vicepresidente de la Comisión Europea y comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, ha señalado que el Gobierno español tiene «la determinación para llevar a cabo los pasos necesarios» para hacer frente a sus problemas y ha incidido en que Europa «seguirá apoyando a España». En una rueda de prensa conjunta con el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, en Madrid, Rehn ha reclamado un «enfoque decidido» para completar el programa de reformas estructurales anunciado por el Gobierno el pasado jueves, que debe llevarse a cabo para ayudar a fomentar el crecimiento económico y a reducir la «dramática» tasa de desempleo en España.
Asimismo, ha incidido en la necesidad de continuar «con determinación» con el proceso de consolidación fiscal, lo que implica tomar decisiones que a veces son duras «pero que serían aún más dolorosas si se posponen». Respecto al sector bancario, ha insistido en que las reformas van «en la buena dirección» y que en esa línea deben continuar, al mismo tiempo que esperó que en noviembre esté ya cerrado el proceso de recapitalización de la banca española y comiencen a entregarse las ayudas.
El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, por su parte, ha considerado una «buena noticia» que España sólo vaya a pedir 40.000 millones de euros a la Unión Europea, que habilitó una línea de hasta 100.000 millones para sanear el sistema financiero español. Así lo ha señalado el ministro en una rueda de prensa tras reunirse con el comisario de Asuntos Económicos de la CE, Olli Rehn, donde ha explicado que la cifra estará alrededor de estos 40.000 millones, aunque Oliver Wyman cifrara las necesidades de capital en algo más de 53.000 millones.
Además, De Guindos ha considerado también positivo que algunas instituciones que hasta ahora habían utilizado la cifra de 100.000 millones para estimar el impacto en la deuda tendrán que reducir el impacto a cuatro décimas del PIB.
Banco malo
El ministro de Economía también ha avanzado que la mayor parte de la financiación del ‘banco malo’ vendrá del sector privado y no tendrá nada que ver con la línea de ayuda formalizada en Europa. El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) aportará menos del 50% de la dotación del ‘banco malo’, por lo que su aportación, según De Guindos, no será determinante.
Rehusa hablar del rescate
El vicepresidente de la Comisión Europea y comisario de Asuntos Económicos y Monetarios ha rehusado especular sobre una posible petición de ayuda de España, ya que hasta ahora no se ha producido, aunque ha incidido en que Europa cuenta con los instrumentos necesarios en caso de cualquier país miembro la solicite. «Estamos dispuestos y preparados para actuar cuando sea necesario», ha afirmado Rehn.
El comisario europeo no quiso aventurar ningún posible escenario sobre España, al mismo tiempo que recordó que todos y cada uno de los países miembros son conscientes de las condiciones que conlleva cualquier programa potencial de ayuda, y que los aspectos concretos se basaran en función del país que solicite la ayuda.
Pensiones
En lo que a las pensiones respecta, Olli Rehn ha advertido este lunes que cualquier decisión futura que el Gobierno español adopte sobre ellas debe de tener en cuenta la sostenibilidad de las finanzas públicas. «Para poder restablecer la sostenibilidad de las finanzas públicas, es inevitablemente necesario garantizar la sostenibilidad del sistema de pensiones. Las decisiones futuras deben tomarse de forma que esto se tenga en cuenta», ha dicho Rehn.
Al mismo tiempo, el comisario europeo ha instado al Ejecutivo de Mariano Rajoy a continuar con la reforma de las pensiones y ha llamado la atención sobre una serie de «recomendaciones específicas» para España, entre ellas la de aumentar la edad de jubilación y la de tomar «cualquier otra medida necesaria para garantizar que el sistema contribuya a la estabilidad de las finanzas públicas».
Respeto a los «compromisos»
El vicepresidente de la Comisión Europea y comisario de Asuntos Económicos y Monetarios también ha asegurado que todos los países miembros de la eurozona «van a respetar los compromisos» que adquirieron en el mes de junio, entre los que se incluye la posibilidad de que el fondo de rescate puede recapitalizar directamente a la banca.
Rehn ha reconocido que se ha convertido en algo normal que cuando los países miembros se reúnen «a veces digan cosas», pero ha recordado que cualquier decisión que afecte a los mecanismos de estabilidad europeos ha de ser adoptada entre los 17 países miembros. El comisario europeo respondía así cuando era preguntado por el comunicado emitido la semana pasada por Alemania, Holanda y Finlandia en el que aseguraban que España seguirá como garante de ayudas a la banca concedidas antes de que haya un supervisor único bancario.