El exsecretario general del Partido Popular (PP) de Madrid Ricardo Romero de Tejada ha asegurado en su declaración como imputado en la causa en la que se investiga la fusión y salida a Bolsa de Bankia que el expresidente de la entidad Rodrigo Rato reconoció ante el consejo de administración que dimitía porque «había perdido la confianza (del Ministerio) de Economía», informaron fuentes personadas en la causa.
Tanto Romero de Tejada como los otros dos exconsejeros del Banco Financiero de Ahorros (BFA), matriz de Bankia, que han declarado este martes ante el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu, Mercedes Rojo y Ángel Villanueva, han apuntado que desconocían que el Banco de España hubiera realizado alguna advertencia sobre la situación de la entidad y que supieron de las nuevas cuentas el 9 de mayo de 2012, cuando Rato anunció su dimisión.
«Tan correcto contablemente son unos beneficios de 300 millones que unas pérdidas de 3.000», ha manifestado el exsecretario general de los ‘populares’ madrileños antes de apuntar que, desde su punto de vista, las últimas cuentas de Rato, que ofrecían unos beneficios de 305 millones de euros, eran «más ajustadas a la realidad» que las del presidente entrante, José Ignacio Goirigolzarri, que ofrecían unas pérdidas de 2.979 millones.
De igual modo, ha señalado que la mayoría de los consejeros consideraron «normal» que las cuentas de la entidad se aprobaran en marzo de este año sin el informe de la auditora Deloitte porque «faltaban algunos datos». Además, apoyaron la salida a Bolsa porque era «bueno para la sociedad» y el Banco de España «estaba al tanto» de la operación, que se produjo el 20 de julio de 2011.
Según ha defendido, la entidad cumplía todos los requisitos fijados por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), ya que el 40% de los accionistas eran institucionales y fue este grupo el que fijó el precio de la acción.
«Reticencias» de una vocal
Mercedes Rojo, asesora técnica del Gabinete de la Presidencia de la Comunidad de Madrid, ha declarado que mostró «reticencias» por su nombramiento como vocal de la Comisión de Auditoría de la entidad porque no tenía «conocimientos financieros».
Tras apuntar que en las reuniones de este órgano nunca se abordó el informe de Deloitte en el que se ponía en duda la valoración de las acciones de Bankia, la compareciente, que inició estudios de Farmacia, ha asegurado que la dirección le convenció de que aceptara el cargo porque iba a estar rodeada de «gente que sabía» y los consejeros tenían que «repartirse las comisiones».
Por su parte, el secretario del Consejo de Administración de Bancaja, Ángel Villanueva, ha explicado que para garantizar la salida a Bolsa de la entidad y que resultara más atractiva para los inversores se reunieron todos los activos tóxicos en el BFA. Antes de declarar ante el juez, ha manifestado que «no hay nada» detrás de la intervención de Bankia, «porque todo estaba muy bien auditado».
Declaraciones narradas en Twitter
Las tres declaraciones han sido narradas en tiempo real en la red social Twitter por el colectivo ’15-MpaRato’, que ejerce la acusación particular en la causa, y ha ido desgranando los comentarios de los imputados bajo el hashtag #los33deBankia. Las comparecencias en este procedimiento se prolongarán hasta el próximo 20 de diciembre, día en el que tendrá que declarar el expresidente de Bankia y exvicepresidente del Gobierno Rodrigo Rato.
A los 33 exconsejeros imputados, así como a Bankia y a BFA en calidad de personas jurídicas, se les atribuyen indiciariamente y de forma genérica los delitos de falsificación de cuentas, administración desleal, maquinación para alterar el precio de las cosas y apropiación indebida.