Los inversores han vuelto a confiar en España, que en el mes de septiembre ha registrado entradas netas de capital por valor de 30.997,9 millones de euros, frente a las salidas de capital que ha registrado en los últimos 14 meses. Así se desprende de la balanza de pagos que elabora el Banco de España, que arroja por primera vez desde junio de 2011 un saldo positivo en entradas de capital en inversiones directas, inversiones de cartera, acciones y bonos, y otras inversiones.
Además, la cifra contrasta con la registrada un año antes, cuando España registró salidas de capital por valor de 7.908,1 millones de euros. En septiembre, las entradas netas de la cuenta financiera, excluido el Banco de España, se produjeron fundamentalmente en el capítulo de otras inversiones (fundamentalmente préstamos, depósitos y repos), en las inversiones de cartera y, en menor medida, en las inversiones directas. En cambio, los derivados financieros generaron salidas de capital este mismo mes.
Así, las otras inversiones generaron en septiembre entradas por valor de 18.734,4 millones de euros, frente a las salidas de 7.682,3 millones del mismo periodo del año anterior. Por su parte, las inversiones en cartera generaron entradas de 10.965,5 millones, frente a las salidas de 3.151,9 millones registradas un año antes.
Las inversiones directas arrojaron entradas netas de 1.885,6 millones en septiembre, superiores a las entradas de 2.516,1 millones de 2011, mientras que los derivados financieros presentaron salidas de 587,6 millones, en contraste con las entradas de 410 millones de euros del mismo periodo del año pasado. A pesar del aumento del capital en septiembre, en los nueve primeros meses del año España siguió registrando salidas de capital por valor de 216.174,8 millones de euros, lo que supone multiplicar por 26 las salidas de capital registradas en el mismo periodo de 2011 (8.306,2 millones de euros).