El Parlamento de Chipre ha rechazado el proyecto de ley sobre la quita a los depósitos bancarios acordada con la ‘troika’ –Comisión Europea (CE), Banco Central Europeo (BCE) y Fondo Monetario Internacional (FMI)– a cambio del rescate de 10.000 millones de euros. Ante esta situación, el Presidente de Chipre, Nikos Anastasiadis, ha convocado para este miércoles por la mañana a los líderes políticos. El partido del Gobierno (Disy) se ha abstenido en la votación, tal como estaba previsto. El texto no ha recibido ningún voto a favor y, en cambio, ha obtenido 36 en contra y 19 abstenciones. Un diputado se encontraba ausente del Parlamento.
El proyecto de ley remitido al Parlamento por el Gobierno de Nicosia prevé salvar de la quita a los depósitos inferiores a 20.000 euros. Pero, a cambio, no compensa esta caída de la recaudación con aumentos de la tasa a las cuentas más altas, sino que mantiene el 6,75% para los depósitos entre 20.000 y 100.000 euros y el 9,9% para los superiores.
El Presidente de Chipre, Nikos Anastasiadis, ha convocado para este miércoles por la mañana a los líderes políticos para tratar de resolver las actuales discrepancias sobre las condiciones del rescate. Concretamente, el presidente chipriota tiene previsto reunirse a las 9.00 hora local con los líderes de las principales formaciones políticas del país.
Previamente, en declaraciones a ‘The Guardian’, Anastasiadis admitió que el Parlamento rechazaría el acuerdo, ya que considera que los términos del rescate pactado con la ‘troika’ son injustos y van en contra de los intereses de Chipre.
Durante el debate parlamentario de este martes, centenares de personas se han concentrado en el exterior del Parlamento chipriota para protestar contra el rescate y pedir a los políticos que rechacen el acuerdo alcanzado con la ‘troika’.
La quita a los depósitos es necesaria únicamente en Chipre
Previamente a este rechazo, el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, ha asegurado que no habrá necesidad de imponer un gravamen a activos en otros países de la zona euro, en la línea de la quita que se aplicará a los depósitos bancarios en Chipre con el objetivo de limitar la ayuda prestada por la ‘troika’ –la Comisión Europea (CE), el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI)–.
El Gobierno chipriota tiene previsto aplicar una tasa a los depósitos por encima de 20.000 euros del 6,75%, que en el caso de los que superen los 100.000 euros ascenderá al 9,9%, con el objetivo de aumentar la liquidez necesaria para recapitalizar su sector bancario, lastrado por la reestructuración de la deuda griega.
Esta decisión ha aumentado la preocupación de que se aplique una medida similar en otros países de la eurozona, socavando la confianza de los depositantes en los bancos. Sin embargo, el ministro francés de Finanzas asegura que esto no ocurrirá en otros países de la unión monetaria europea.
«Está absolutamente fuera de lugar, no hay ninguna necesidad de un gravamen en los activos de otros países», aseguró Dijsselbloem en declaraciones al Parlamento holandés. En este sentido, reiteró que, debido al tamaño del sector bancario chipriota y las necesidades de recapitalización de sus entidades, ha sido inevitable recurrir a la ayuda de los depositantes.