El Euríbor, índice al que están referenciadas la mayoría de las hipotecas españolas, ha cerrado el mes de octubre en el 0,541%, 0,109 puntos menos que el Euríbor registrado hace un año, y abaratará las hipotecas en cerca de 73 euros al año.
En tasa diaria, el índice se ha mantenido en el 0,548% marcado ayer, después de sufrir a lo largo del mes una serie de fluctuaciones que le llevaron a alcanzar máximos el día 28.
Con estos datos de cierre de mes, una hipoteca media de 120.000 euros a 20 años experimentará una rebaja anual de unos 73 euros y diaria de 6 euros.
El analista de XTB Gustavo Martínez ha explicado a Europa Press que el Euríbor interbancario «probablemente» se moverá en el 0,55% a lo largo de 2014 mientras se prologuen las políticas monetarias expansivas de mantenimiento de tipos en mínimos por parte del Banco Central Europeo (BCE).
Por tanto, ha insistido en que las hipotecas no bajarán el próximo año, «pero tampoco subirán». «Esto significa que los principales beneficiados serán las familias que contrataron hipotecas antes del comienzo de la crisis, porque los diferenciales que añaden los bancos eran más bajos antes del 2008. Esto produciría una bocanada de aire fresco a aquellas familias con bajos diferenciales y sus hipotecas sin suelo», ha indicado.
Sin embargo, ha recalcado que esta situación será distinta en hipotecas contratadas a partir del 2008, pues, pese a que el BCE ha ido bajando los tipos, los bancos «no han querido mermar sus beneficios».
Riesgos a medio plazo
A su juicio, la consecuencia de esto es que hoy se contratan hipotecas con diferenciales mucho más altos, «incluso del triple del diferencial», de los años de bonanza. «Esto no supone un problema en el corto plazo, pero si en el medio plazo, cuando el Euríbor y el endeudamiento de las familias suban. Muchas de ellas se verán obligadas a renegociar sus hipotecas», ha augurado el experto.
Para Martínez, el repunte que ha experimentado el índice en las últimas semanas está relacionado con la proximidad de los test de estrés y la «tensión de confianza» que ello genera.
Por su parte, el analista de IG Markets Daniel Pingarrón ha explicado a Europa Press que la fuerte apreciación del euro frente al dólar puede motivar que el BCE, «aun sin acometer ninguna bajada de tipos, ponga el acento en su discurso en la posibilidad de hacerlo, tratando de fomentar cierta relajación en la cotización del euro, cuya apreciación tiene efectos similares en cierta medida a una subida de tipos».
A su entender, ese lenguaje del BCE va a continuar conteniendo al Euríbor, que, ha subrayado, «se puede ver favorecido por la apreciación del euro».