El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, rebaja la euforia y el optimismo de algunos de sus ministros, como el de Cristóbal Montoro, que lleva varias semanas vislumbrando la luz al final del túnel, y pide no caer en la relajación y el sosiego puesto que aún «no estamos en una navegación fácil». «Vamos en la buena dirección, pero todavía estamos lejos de alcanzar nuestros objetivos», ha aseverado el líder del Ejecutivo, quien ha animado a todo su Ejecutivo a continuar con las reformas para poder decir, «sin faltar a la verdad», que España ha salido de la crisis.
Durante su intervención en el Foro Emprendedores y Autónomos 2013, organizado por la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Rajoy ha asegurado que, por el momento, lo que ha hecho el Gobierno es «constatar» los primeros indicios de recuperación, aunque ha preferido ser más comedido que algunos de sus compañeros e insistir en que «mientras el paro se cuente por millones y más de la mitad de los jóvenes no encuentren un empleo» él no podrá decir que la crisis «ha quedado atrás».
En este punto se ha referido a la mejora del comercio minorista, al crecimiento de más del 1% de las matriculaciones respecto a 2012 tras tres años de caídas o el incremento del 7,2% en el gasto de turistas extranjeros entre enero y agosto respecto al mismo periodo de 2012. Por ello, ha asegurado que España va «en la buena dirección y los esfuerzos no han sido en balde», pero ha advertido de que «aún se está lejos de alcanzar los objetivos propuestos», por lo que «el Gobierno no se ha ganado el derecho a relajarse un minuto». «Nos enfrentamos a un riesgo cierto, los datos que venimos conociendo en las últimas fechas -en relación al crecimiento del PIB en un 0,1% en el tercer trimestre- pueden inducir a creer que es una navegación fácil y que sólo hay que dejarse llevar para que la economía nos saque de la crisis», ha dicho. En esta misma línea, ha señalado que aunque se han logrado avances en muchos campos, también en el financiero, que permitirá que «más pronto que tarde fluya el crédito con normalidad», lo cierto es que «aún queda la parte más importante».
«El fin de la recesión no es el fin de la crisis, pero sin salir de la recesión no se puede aspirar a salir de la crisis. Es dar un paso importante en la salida de la crisis. Hay que mantener el ritmo de las reformas y el esfuerzo colectivo, es mucho lo que hemos logrado, pero muchísimo lo que tenemos que hacer antes de sentirnos satisfechos. Es evidente que no hemos llegado al final del viaje, pero hemos superado una etapa trascendental, las más difícil», ha apostillado.
Por último, el presidente del Gobierno se ha referido a algunas de las demandas de los autónomos y ha recalcado que ya se puesto en marcha un nuevo plan de pago a proveedores, de modo que se atenderán otros 13.000 millones de euros de facturas no pagadas y que se empezarán a pagar lo más tarde a principios del mes de diciembre. «Espero que no tengamos que volver a hacer ningún plan de pago a proveedores más», ha añadido.