El sector eólico tendrá que devolver 640 millones de la retribución cobrada entre julio de 2013 y diciembre de ese año, periodo en el que, pese a que ya había sido aprobado el real decreto ley de la reforma energética, siguió percibiendo unos incentivos a cuenta conforme a la normativa anterior, sabedor de que luego habría de restituir la diferencia.
La cifra de 640 millones corresponde a los cálculos provisionales de la Asociación Empresarial Eólica (AEE), que explica en una nota que esta cantidad comenzará a devolverse tras la publicación por parte de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) de la séptima liquidación de 2014.
La restitución de este importe se repartirá a lo largo de nueve liquidaciones, hasta concluir en mayo de 2015. El impacto será diferente según cada instalación, advierte la asociación empresarial.
Durante los once meses de tramitación de la reforma energética, las empresas continuaron cobrando la retribución correspondiente a la regulación anterior, sabiendo de antemano que la retroactividad de la norma les obligaría a devolver una cantidad «indeterminada y desconocida» hasta el pasado junio, señala.
Esta circunstancia ha dificultado «considerablemente» el trabajo de los productores eólicos y les ha impedido tomar medidas para minimizar las pérdidas. No fue hasta junio cuando quedó aprobada definitivamente la nueva normativa.
La AEE indica que a estas complicaciones se suma el «fuerte retraso» en los pagos por parte de la CNMC. Tras la liquidación provisional sexta, la eólica sólo había percibido el 60,4% de lo que le corresponde, un desfase que se debe a que el Ministerio de Hacienda sólo ha cumplido en parte su compromiso de destinar al sector un porcentaje de los ingresos procedentes del impuesto del 7% a la generación eléctrica y de los ingresos de las subastas de CO2.
«Debido a los problemas de liquidez que esta situación conlleva para las empresas, AEE ha solicitado ante las instancias pertinentes que los desfases se resuelvan cuanto antes», afirma.
Interpretación de la CNMC
Los eólicos también denuncian una interpretación de la CNMC sobre la normativa según la cual para las instalaciones que se pusieron en marcha entre el 1 de enero y el 14 de julio de 2013, fecha de publicación del Real Decreto-Ley 9/2013, se considerará que su vida útil regulatoria comienza el 1 de enero de 2014.
Este punto de partida implica que estas instalaciones tendrán que devolver las primas percibidas el pasado año, un total de 13,6 millones. AEE no está de acuerdo con esta interpretación e insiste en que la reforma energética está teniendo un efecto «desproporcionado» sobre su actividad.
Los ingresos del sector en el semestre ascenderán a unos 1.000 millones antes de impuestos, cerca de un 60% por debajo de los del año anterior, indica, antes de señalar que, en el primer semestre del año, solo se instaló un aerogenerador de 0,08 megavatios (MW) en España.