El comisario de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, ha dicho este lunes que no ve riesgos de una salida de Grecia de la eurozona (o 'Grexit') tras las elecciones del próximo domingo 25 de enero, pero ha dejado claro que el futuro Gobierno, sea cual sea, deberá cumplir sus compromisos sobre la deuda y proseguir con las reformas estructurales.
«No tengo miedo de lo que ocurra en las elecciones griegas del domingo. Es un desafío muy fuerte, pero tenemos la capacidad para responder y nos estamos preparando para todo tipo de escenarios en Grecia», ha asegurado Moscovici durante una conferencia sobre el futuro de la eurozona. «No es fácil, por supuesto, pero creo que tendremos respuestas», ha sostenido.
«No nos enfrentamos a un peligro de un 'Grexit' o cualquier tipo de peligro. Habrá algunas dificultades que podrían incluso ser muy fuertes. Tendremos que discutir de forma constructiva, pero también firme, con el futuro Gobierno griego», ha señalado el político francés.
Moscovici se ha negado a especular sobre los posibles escenarios tras las elecciones alegando que «los votantes deben elegir libremente y no pensar que están presionados». Eso sí, ha rechazado la demanda de la Coalición de la Izquierda Radical (Syriza), que lidera las encuestas, de reestructurar la deuda.
«Sobre la reestructuración de la deuda, mi único comentario es que 'pacta sunt servanda'. Los compromisos que existen seguirán estando sobre la mesa después de las elecciones, sea cual sea la elección de los ciudadanos griegos», ha resaltado el comisario de Asuntos Económicos. El futuro Gobierno griego, ha proseguido, debe tener un «compromiso proeuropeo claro» y las reformas «deben continuar de una forma u otra».
Moscovici ha señalado que el día después de las elecciones griegas, el lunes 26 de enero, está prevista una reunión del Eurogrupo en la que «tendremos que decir claramente lo que creemos que ocurrirá». El Eurogrupo ya ha ofrecido a Grecia una prórroga del segundo rescate hasta finales de febrero y una línea de crédito preventiva posterior. «Estas son cuestiones que pueden discutirse de nuevo, pero el lunes veremos en qué condiciones», ha señalado.
Alemania, Francia y el BCE
El comisario de Asuntos Económicos ha avisado de que «la actual situación con un crecimiento tan bajo, con tan poca inflación y con un paro tan alto y creciente desigualdad es insostenible. Si no hay resultados en los próximos cinco años, el proyecto europeo será rechazado».
Moscovici ha indicado que «cuando un país, como Alemania, tiene margen de maniobra presupuestaria, debe usarla para reforzar la demanda interna y la inversión», pero ha reconocido que la Comisión no dispone de instrumentos para presionar a Berlín en este sentido.
El comisario de Asuntos Económicos se ha pronunciado también sobre la situación en su país, Francia, que a su juicio no es «el enfermo de Europa» ni «un problema para la eurozona». «Es un país con grandes activos, pero es también un país que necesita grandes reformas», ha dicho.
Moscovici ha expresado además su «confianza» en el programa de compra de deuda que podría activar el Banco Central Europeo (BCE) el próximo jueves. «Mario Draghi, en los últimos dos años, ha tomado decisiones muy sabias. Sus decisiones tienen siempre un fuerte apoyo del eurosistema, son favorables al crecimiento y él es consciente de los peligros a los que nos enfrentamos. Así que me siento bastante confiado con lo que está a punto de hacer», ha explicado.