Los ministros de Economía de la zona euro han aprobado la nueva lista de medidas de Grecia prorrogando así la ayuda financiera, según ha informado el ministro eslovaco, Peter Kazimir. Así, se cierra el primer capítulo de las negociaciones entre el país heleno y la Troika. La prórroga sirve para que Grecia reciba ayuda financiera los próximos cuatro meses, que consta de (3.600 millones de euros) y a utilizar 10.900 millones de euros en bonos para recapitalizar sus bancos
«Se mantiene el acuerdo del viernes de la eurozona con Grecia. Grecia tiene trabajo duro que hacer hasta finales de abril. Ahora queremos ver los números», ha declarado Kazimir a través de su cuenta en Twitter.
El acuerdo se encontraba encallado en la condicionalidad en materia económica que pedía el Eurogrupo, respecto de la ayuda financiera que recibirían los griegos. El nuevo gobierno de Syriza debía presentar su proyecto económico para que los ministros de Economía dieran su visto bueno.
El Eurogrupo ha celebrado una teleconferencia de apenas una hora para examinar el documento que Atenas remitió poco antes de la pasada madrugada a las instituciones con las que negoció el rescate: la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional.
Syriza se 'olvida' de su programa
Han pasado casi dos meses desde que Syriza ascendió al poder en Grecia y en sus nuevas propuestas enviadas al Eurogrupo queda muy poco de su programa. El ejecutivo de Tsipras no detendrá ninguna privatización. Tampoco va a subir el salario mínimo. En el documento enviado no aparecen otras grandes medidas que prometió como la contratación de 300.000 empleados públicos o subida de las pensiones.
Entre sus medidas Syriza llevaba la prohibición de los desahucios que se convertirá en una “consulta” con los bancos para evitarlos. El gran plan de salvación griego se condiciona a que no tenga “efectos fiscales negativos”. Los impuestos se subirán, ya que, se van a sacar productos de los tramos de IVA reducido.
En definitiva, todas las medidas que pretenda llevar a cabo Syriza en gasto social deberán estar contrarrestadas con más ingresos, dícese, de recaudar más con impuestos.
Desembolso a cambio de resultados
El Eurogrupo no desembolsará el dinero hasta que no vea que las medidas llevadas a cabo por Syriza van en la ‘buena dirección’. Así, lo ha advertido hoy mismo Dijsselbloem en el Parlamento Europeo, todo pago debe ser autorizado por el Eurogrupo y eso solo ocurrirá cuando la troika certifique que Atenas «está haciendo progresos» en esa lista de reformas.
El primer gran análisis de la situación griega se realizará en abril, cuando la Troika estudié con detenimiento la implantación del programa de Syriza.