El Banco Central Europeo ha vuelto a endurecer su actitud hacía el gobierno griego. Luc Coene, miembro de la junta de gobierno del BCE y presidente del Banco Central de Bélgica, ha reiterado que el único camino para Grecia es el de las “reformas”. El BCE ha jugado un papel muy importante en el tira y afloja por parte de Grecia y el Eurogrupo, en primer lugar dejó de aceptar la deuda griega como colateral presionando al gobierno heleno. Incluso, se especula, que la intervención de Mario Draghi, presidente del BCE, fue clave en el pacto entre ambos al mostrar a los dirigentes de Syriza la fuga de capitales de los bancos griegos que en unos días podría haber supuesto un corralito.
Coene se ha muestrado muy crítico con el papel de Alexis Tsipras, primer ministro griego, alegando que ha vendido “falsas esperanzas” a su país. “Syriza ha hecho promesas que no puede cumplir” ha subrayado el belga.
El presidente del organismo belga se ha unido a la corriente crítica contra Syriza. Entre ellos, destaca Wolfang Schäuble, ministro de finanzas alemán, que ha reiterado en varias ocasiones que los helenos deben asumir sus compromisos, también se ha especulado (palabras del propio Tsipras) que España o Portugal han sido bastante críticos. Ahora Coene se une a las declaración que ya realizara Schäuble alegando que “la reforma es el único camino. Que me digan de dónde llegará el dinero si rechazan pagar a otros países europeos lo que se les deben”.