El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha insistido este miércoles en que el Gobierno tiene su propia hoja de ruta económica, que puede llevar a cabo gracias a que España mantiene su soberanía al haber evitado el rescate, y ha reiterado que no tiene intención de subir los impuestos, tal y como recomienda el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Así lo ha señalado durante la sesión de control al Gobierno en el Pleno del Congreso, donde los líderes de la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA), Cayo Lara, y de UPyD, Rosa Díez, han preguntado al presidente por su intención de seguir las sugerencias del organismo que preside Christine Lagarde, entre las que se cuentan la subida del IVA y otros impuestos especiales, la introducción de copagos o una nueva reforma laboral.
«Sobre las recomendaciones del FMI decir que son eso, recomendaciones gracias a que España supo evitar el rescate. Si no, estaríamos en la situación de otros países. Por tanto, esas recomendaciones las leemos con atención, porque en ocasiones dicen cosas muy razonables, pero nosotros fijamos nuestra propia hoja de ruta porque mantenemos nuestra soberanía económica», ha dicho, insistiendo en que «lo importante es que España, a diferencia de otros países que hicieron políticas muy equivocadas, mantiene su soberanía económica y puede tomar sus propias decisiones».
En este punto, ha recordado las bajadas del IRPF y el Impuesto de Sociedades que están previstos para 2016 en la reforma fiscal que entró en vigor el pasado 1 de enero, y ha asegurado que «se estudiarán nuevas bajadas en función de la recaudación» tributaria. «Yo ya le digo que no voy a subir impuestos. Al contrario, voy a bajarlos», ha añadido, señalando que «en ocasiones» sus decisiones coinciden con las sugerencias del FMI y «en otras no».
Mantener la política reformista
No obstante, para el presidente lo más relevante del informe del Fondo Monetario son las previsiones de crecimiento de España este año, que eleva al 3,1%, «más del doble que la media de la Eurozona y más que la propia previsión del Gobierno (2,9%)». «Es un dato muy importante, puesto que estuvimos varios años en crecimiento negativo, Si este año (se llega al) 3,1% sería un buen dato», ha apostillado.
Además, el trasfondo del informe apunta, según Rajoy, que «dar marcha atrás en la política económica de las reformas puede constituir un error» porque «afectaría al crecimiento y a la creación de empleo que ya se está produciendo» y que permitirá que este año se puedan crear 600.000 puestos de trabajo y que al final de la próxima legislatura se pueda cumplir «el gran objetivo» de llegar a los 20 millones de empleados.
En este sentido, el líder 'popular' ha hecho gala de su «buena política económica», que se ha basado tanto en la aplicación de un plan de consolidación fiscal –«Porque no tiene ningún sentido ni es posible gastar por encima de lo que se ingresa», ha dicho– como en reformas estructurales «importantes» como la financiera, la laboral o la energética, entre otras.
«Esas reformas han producido resultados: Se han corregido los desequilibrios, se ha mejorado la competitividad y, lo más importante, se está creciendo y creando empleo a muy buen ritmo. Hay que seguir trabajando, empeñándonos en mantener esa política. Y lo que nos pide el FMI es mantener el espíritu reformista con algunas medidas concretas, que algunas podemos compartir y otras no», ha reiterado.
No obstante, el presidente del Gobierno sí comparte con el FMI otras sugerencias, como la necesidad de facilitar la competitividad de las pymes o de controlar el gasto público y la deuda. «Y, en general, estoy de acuerdo con que hay que mantener la política reformista que ha conseguido superar la crisis, aunque todavía queden muchas cosas por hacer«, ha añadido.
Por eso, ha instado a la oposición a dirigir sus quejas sobre las recomendaciones del FMI al propio Fondo, pero «no al Gobierno de España, que tiene una política económica cuyo objetivo capital era superar la crisis y, ahora, es crecer y crear empleo».
«Y hoy puedo decir, y todos podemos estar muy satisfechos, que ya hay más personas afiliadas a la Seguridad Social y menos parados que cuando llegamos al Gobierno. Y eso que vivimos una situación muy difícil en 2012 y 2013. Pero en 2014 y 2015, como consecuencia de las políticas puestas en marcha, ya se crece, se crea empleo –1 millón entre 2014 y 2015– y, si seguimos perseverando en los próximos años podremos ver cómo 20 millones de españoles pueden trabajar», ha resumido el presidente.
Hay sugerencias positivas
Sin embargo, Rosa Díez ha explicado que junto a asuntos que el FMI «ignora» en su informe –como la «insultante concentración» de la riqueza, el incremento de la pobreza y la desigualdad o la caída de las pensiones o las prestaciones por desempleo–, el organismo también apunta algunas cuestiones «positivas», tales como la de crear un contrato único indefinido para «acabar con la dualidad» del mercado de trabajo o «reducir el sobreendeudamiento y exigir responsabilidades por malas prácticas pasadas, como las de Bankia».
«Nos da miedo que elija las peores recomendaciones, las que son malas para los ciudadanos», ha reconocido la líder magenta, instando al presidente a atender las sugerencias del Fondo Monetario que UPyD ha planteado una y otra vez a lo largo de esta legislatura y recordándole que el FMI también ha señalado que «el crecimiento económico español se debe fundamentalmente a factores exógenos» como el tipo de cambio del euro o el entorno europeo.
Por su parte, Cayo Lara ha criticado tanto al Fondo, por «echar un cable en la campaña electoral» al PP al «avalar» unas reformas que, a su juicio, «sólo han beneficiado al capital a costa de destruir empleos de calidad, bajar salarios y aumentar la pobreza»; como a un Banco de España que «una vez más se suma de forma servil y vergonzosa» a unas «recetas que hunden la economía, deterioran la vida de los trabajadores y aumentan la desigualdad».
Así, el líder de Izquierda Unida ha rechazado el contrato único porque es «una invitación a aumentar los despidos sin resolver la elevada rotación del empleo», el ajuste salarial en un país donde un tercio de los trabajadores percibe menos del Salario Mínimo y la mitad no llega a los 900 euros al mes, o la subida de impuestos que «acentuará una injusticia fiscal que ya está entre las más altas de Europa».
«La salida democrática y social de esta crisis no pasa por las recomendaciones del FMI y de un Banco de España al servicio de la CEOE. Son políticas fracasadas que nos ha llevado al mayor desastre económico y social de la Democracia. Es evidente que el FMI sólo pretende garantizar el pago de la deuda a los acreedores internacionales a los que representa y elevar los beneficios del capital. Pero hay otra salida social a la crisis. Ahora que se habla de radicalidad, bájese del monte del radicalismo del FMI y gobierne el tiempo que le queda para la mayoría social del país», ha reclamado Lara.
Al inicio de su intervención, el dirigente de IU-ICV-CHA ha bromeado con la coincidencia de su pregunta con la de Rosa Díez, señalando que «hoy que va a remodelar el Gobierno» le han «puesto fáciles las preguntas». «Gracias por informarme de que voy a remodelar el Gobierno. Es bueno enterarse todos los días de novedades, aunque sea por boca del señor Lara. Se lo agradezco», ha replicado Rajoy.