El Gobierno español se ha propuesto lanzar un mensaje de tranquilidad a los inversores, aunque la evolución de los mercados hace indicar que no se lo han creído. España está siendo el país más castigado por la crisis griega. En la apertura del Ibex ha llegado a caer un 5%, aunque ahora se ha estabilizado cercano al 3,5%. La prima de riesgo ha llegado a dispararse un 40% al comienzo de la mañana, aunque se ha estabilizado con una subida cercana al 23% parecida a la que ha experimentado la italiana.
La primera en tomar la palabra ha sido la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha asegurado este lunes que España puede afrontar con «solvencia y seguridad» la crisis griega porque el país cuenta ahora con una economía más «fuerte» gracias a las reformas estructurales que ha llevado a cabo en los últimos años.
Por su parte, el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, ha señalado que «España nunca ha estado tan bien preparada» para hacer frente a la crisis griega. Curiosamente, el ministro ha afirmado que el país no cuenta con un plan de contingencia específico ante la eventual salida de Grecia del euro, a pesar, de que es el país de Europa que está siendo más castigado por la situación. Por encima de Francia o Alemania. Según de Guindos es porque el «principal aval» es el crecimiento económico, la creación de empleo, las reformas y la solvencia del sistema financiero.
«Este es el principal aval para hacer frente a las circunstancias extraordinarias con las que nos estamos enfrentando (…), y España nunca ha estado tan bien preparada para hacer frente a estas circunstancias, estamos mucho mejor preparados que hace dos o tres años», reiteró.
En cualquier caso, apuntó que aún hay tiempo para llegar a un acuerdo con Grecia antes de las doce horas de la noche del martes, momento en el que expira la prórroga del actual programa de rescate, y aseguró que toda la UE quiere que el país heleno siga en el euro por el bien de Grecia y por el del conjunto de Europa