El Fondo Monetario Internacional ha ratificado que la economía española será la que más crezca de los países desarrollados. El organismo ha cifrado que el incremento se establecerá entorno el 3,1%, confirmando el pronóstico que había realizado el pasado mes de junio. De las grandes economías mundiales sólo la estadounidense se acercaría a la española alcanzando el 3%, pese al frenazo del primer trimestre.
El Gobierno de Mariano Rajoy tiene previsto actualizar su cuadro macroeconómico con datos aún más optimistas que los expuestos por el organismo presidido por Christine Lagarde. Frente al 3,1% que prevé el FMI, el Ejecutivo elevará su previsión al 3,3% para 2015. Respecto a 2016 el Gobierno español elevará una décima su previsión hasta el 3% y hasta cinco décimas más alta que la que prevé el organismo. La próxima revisión popular situaría a España con la misma previsión que los Estados Unidos y volvería a ser líder de crecimiento.
A pesar de los buenos datos, el FMI también ha dado un toque de atención al Gobierno. “Un 3% es bueno, pero mirando la tasa de desempleo aún queda mucho para cantar victoria” asique no se puede hablar de “milagro español”. Además, el economista jefe de la institución, Olivier Blanchard, ha señalado «sentimos bastante optimismo, la tasa de crecimiento en muy buena noticia, pero hay riesgos”.
Líder en creación de empleo
También se ha destacado la importante evolución del mercado de trabajo español, que ha sido un auténtico quebradero de cabeza desde que comenzó la crisis. España será el país que registre mayor crecimiento del empleo este año y el siguiente entre los apíses desarrollados. La tasa de desempleo se sitúo en mayo en 22,5%, el segundo más alto de la OCDE. Sin embargo, en su último informe la organización sobre las perspectivas del mercado laboral augura que el empleo crecerá en 2015 a un ritmo del 2,9%, sólo por detrás del 4,1% previsto para Islandia entre los 34 miembros de la organización.
El próximo año, el mercado laboral español mantendrá el buen tono y será el que mayor ritmo de crecimiento del empleo muestre en 2016, con un 2,8%, igual que la tasa de crecimiento prevista por la OCDE para Grecia. De este modo, las nuevas previsiones de la OCDE apuntan a que España logrará reducir su tasa de paro al 21,5% este año y al 19,7% en 2016, situándola por debajo del umbral del 20% por primera vez desde 2010.
El informe de la OCDE muestra un optimismo generalizado sobre la evolución del empleo, ya que prevé que todos los países miembros de la organización lograrán crear empleo en 2015 y 2016, lo que permitirá reducir la tasa de paro de la institución al 6,8% en 2015 y el 6,5% el año que viene. No obstante, la organización señala que actualmente hay unos 42 millones de personas desempleadas en la OCDE, tres millones que en 2014, pero aún diez millones más que antes de la crisis.
«Se está acabando el tiempo para evitar que las cicatrices de la crisis sean de carácter permanente», indicó el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, en la presentación del documento. «Los gobiernos necesitan actuar ahora para evitar un incremento permanente del número de trabajadores atrapados en un desempleo crónico o moviéndose entre el paro y empleos precarios y mal pagados», añadió.