El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, da el pistoletazo de salida a la campaña electoral del Partido Popular. Lo hace en el Congreso de los Diputados con la presentación de los nuevos Presupuestos Generales del Estado para 2016, en la que no sólo ha defendido las reformas estructurales puestas en marcha por el Ejecutivo de Mariano Rajoy y que «han colocado a España a la cabeza del crecimiento económico en la zona euro«, sino que también ha aprovechado para hacer anuncios de corte electoral con los que pretende recuperar la confianza de los españoles a marchas forzadas.
En este sentido, los miembros del equipo de Hacienda no sólo han insistido en los anuncios conocidos (guiños a los funcionarios y gasto social), sino que también han prometido nuevas bajadas de impuestos. Tal y como ha asegurado Montoro, la intención del PP es volver a bajar el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) si gana las elecciones generales. Eso sí, no aclara ni cuánto, ni cuándo, sino que se limita a apuntar que será en «función del margen presupuestario que exista». Por contra, en el proyecto sí se recoge ya la reducción del Impuesto de Sociedades prevista en la reforma fiscal, y que pasa por bajar el tipo impositivo al 26% con carácter general, y al 20% en el caso de las PYMES que se apliquen dos nuevas deducciones para favorecer la autofinanciación y el endeudamiento empresarial. «El Gobierno apuesta por seguir bajando impuestos», ha zanjado Montoro.
Todas las partidas sociales suben, aunque las cantidades no son tan espléndidas como el Gobierno había dando a entender. En total, el Gobierno destinará en 2016 188.130 millones de euros al gasto social, un 0,4% más que en 2015. En concreto, son presupuestos que se benefician del aumento de ingresos por la recaudación y del descenso de gasto en prestaciones por desempleo y en intereses públicos (ahorro de 7.500 millones). Tal y como detalla el libro amarillo hecho público este martes, el Gobierno destinará un total de 19.820,94 millones de euros al pago de prestaciones por desempleo el próximo año, lo que representa un 21,7% menos en comparación con el presupuesto de 2015. Una decisión que el Gobierno justifica alegando que el gasto en prestaciones por desempleo empieza a experimentar «el efecto positivo de las medidas adoptadas por el Ejecutivo en materia laboral», reflejadas en la reducción de la tasa de paro, que en el segundo trimestre de 2015 se situó en el 22,4%, 2,1 puntos menos.
Y esto es lo que ha permitido elevar por primera vez desde 2009 los salarios de los funcionarios (un 1%) y las ayudas a la familias, dependencia y becas de educación. El gasto social aumenta un 3,8%. En concreto, el dinero que se destinará el año que viene al colectivo de los ancianos, personas dependientes, migrantes, inmigración, infancia y familia será de 1.991,58 millones de euros, frente a los 1.843,35 millones de euros de 2015. El apoyo a la familia e infancia será de 48 millones de euros. Y el importe destinado al sistema de autonomía y atención a la dependencia asciende en 2016 a 1.252,29 millones de euros, un incremento de un 6,4% en 2015.
El aumento en becas fue otro de los anticipos que el viernes pasado hizo el presidente Rajoy. Y este martes hemos conocido el irrisorio detalle. Tal y como detallan las cuentas públicas, esta partida aumenta un 0,2%. En concreto, el programa de becas y ayudas al estudio contará en 2016 con 1.472,4 millones de euros, dos millones más que en 2015 (1.470 millones) y vuelve la partida destinada a las comunidades autónomas para programas de adquisición de libros de texto, que se suprimieron en 2014. Eso sí, el gasto destinado a la política de Educación en el año 2016 ascenderá a 2.483,96 millones de euros, un 9,3% más que en 2015, fondos destinados a la LOMCE.
Además, la prometida actualización del 1% de las retribuciones de los empleados públicos, la recuperación del 50% de la paga extra de 2012 y el aumento de financiación del régimen de mutualidades supondrá un aumento del 4,9% en 2016 de gastos de personal del Estado hasta los 16.838,58 millones de euros. Un aumento del que también se verán beneficiados los miembros del Gobierno, que por primera vez en esta legislatura verá incrementada su nómina. Si Mariano Rajoy sigue siendo el jefe del Ejecutivo en 2016 tras las elecciones generales previstas para otoño, comenzará a percibir un salario anual de 78.966 euros, en concreto, un 1% más que en 2015.
Más financiación para Cataluña
Y por si quedaba alguna duda del tinte electoral de estos presupuestos, Hacienda ha querido hacer un guiño a Cataluña donde está previsto que en menos de dos meses se vuelvan a celebrar elecciones autonómicas. El presidente de la Generalitat, Artur Mas, firmó este lunes a las 9 de la noche el decreto de convocatoria, y aunque en el texto publicado no se hace referencia explícita, su intención no es otra que obligar a los catalanes a posicionarse respecto a la independencia de la región. El presidente del Gobierno y su 'número dos', Soraya Sáenz de Santamaría, llevan desde el pasado viernes alertando al Gobierno catalán de que no hay margen de maniobra y que estarán «vigilantes». Pero mientras, han optado por utilizar la presentación de las nuevas cuentas para recordar a los catalanes «quién paga sus servicios públicos».
Según el nuevo proyecto, la financiación de las comunidades autónomas asciende a 92.715 millones de euros, resultando Cataluña «la más beneficiada». En concreto, contará con 1.862 millones de euros adicionales, lo que supone un incremento del 12,12%. Esta cifra se eleva hasta los 2.888 millones de euros si se tienen en cuenta también los ahorros que conseguirá la Generalitat gracias a los intereses cero que el Ministerio aplica a las emisiones de deuda autonómicas. Se trata, por tanto, de la comunidad autónoma «que más beneficio tiene por ahorro en tipo de interés y por la evolución del sistema de financiación en 2016», según ha rematado el secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta. Montoro no ha desaprovechado la oportunidad brindada y ha recordado que Cataluña es de las comunidades «que más ha mejorado su financiación», a pesar de que «tiene un Gobierno que se dedica a otra cosa», en lugar de «a mejorar sus servicios básicos».
Después de Cataluña, las comunidades autónomas con mayor financiación prevista para 2016 son Andalucía (17.121 millones) y Madrid (12.425 millones), mientras que los mayores incrementos se registran, además de en Cataluña, en la Comunidad Valenciana y en Andalucía, donde crecerán un 11,79% y un 11,11%.
Mensaje para los votantes de Podemos
Eso sí, el ministro de Hacienda ha querido dejar claro que estos son los «únicos presupuestos posibles». Montoro ha querido matizar que estas serán sus cuentas si el PP vuelve a ganar las próximas elecciones, pero que si finalmente ocupa «otro» la Moncloa podrá cambiarlos «como cualquier ley», aunque deberá explicar por qué lo hace puesto que son «los únicos posibles». «A España le ha sacado de la crisis la política de austeridad», ha advertido el ministro, «podemos compararnos con otros países hermanos que vemos hoy que no tienen salida y solución», ha rematado. Montoro se ha referido concretamente a Grecia y a su corralito; y ha insistido en que «hoy España crece a la cabeza de Europa, crea empleo, y los datos confirman que está en la senda correcta para volver a recuperar el nivel de empleo de 2007. Tenemos que proseguir con una política que nos esta sacando de la crisis». El ministro de Hacienda ha vuelto a asegurar que si el PP sigue gobernando, España recuperará la deseada cifra de los 20 millones de empleados.