Sonrisas. Flases. Palabras amables de unos y de otros. Más sonrisas. Más flases. Tijeras ofrecidas en una bandeja de plata (como marca el protocolo). Más sonrisas. Más flases. Un pequeño paseo por el lugar engalanado para la ocasión. Finalmente, más sonrisas y más flases. El eterno ritual de la inauguración que conocen a la perfección los políticos, olvidado años atrás y recuperado en este 2015. Todo ello debido al conjuro que invoca a las inauguraciones, esa palabra mágica no es otra que elecciones.
Los últimos años han sido realmente difíciles para los políticos que han gobernado España, ya sea desde la Administración Central, desde los gobiernos autonómicos o los consistorios. Los años de exceso se habían agotado y no podían desarrollar la labor con la que más disfrutan, malgastar el dinero público. Antes daba igual, a cada proyecto disparatado se le unía otro peor. Aeropuertos, estatuas, monumentos incluso sus propias ciudades temáticas como la de Justicia, la de la Cultura, la del Circo o la de la Luz y el Cine. En el camino se quebró un sistema con más de 100 años de antigüedad como las cajas de ahorros o dispararon la deuda de ayuntamientos y autonomías. Deuda que desgraciadamente pagarán las generaciones futuras.
Tras años de ajustes para reducir el déficit, más por el lado de los impuestos que por el del gasto, las inauguraciones de proyectos disparatados se han reducido casi a cero. Los dirigentes populares tuvieron que improvisar visitas a empresas, colegios u hospitales para dejarse ver como el caso de María Dolores de Cospedal, Ramón Bauza, Alberto Núñez Feijóo y otros tantos.
La convocatoria de elecciones a los tres niveles posibles: Locales, Autonómicas y Generales hacen de este 2015 un año distinto a los exteriores. Con la palabra mágica apareciendo hasta en tres ocasiones es lógico pensar que es un año de inauguraciones. No podía ser de otra manera. Aunque se ha cambiado las obras faraónicas por la inauguración de las nuevas vías de transporte.
El zenit megalómano ha llegado con las vías de transporte, España se sitúa en el ranking de los tres tipos de transporte principales:
– Bronce en longitud de autovías, una gran parte de ellas han sido rescatadas.
– Prácticamente oro en el número de aeropuertos por millón de habitantes, en total hasta 52 (Alemania con el doble de población tiene 52).
– Doble récord mundial en AVE: oro por ser mayor número de kilómetros de AVE por millón de habitantes, alcanzará los 79 con las nuevas construcciones (casi doblando al segundo). También oro en ser el que menos lo usa, según un estudio publicado por Fedea Daniel Albalate y Germá Bel, profesores de la Universidad de Barcelona.
Pero ello no importa, tampoco que diversos estudios reflejen que el AVE es una inversión ruinosa y elitista. «El AVE impulsa la actividad económica, refuerza la movilidad, cohesiona y vertebra nuestro país, y redunda en la igualdad de oportunidades», es el discurso del presidente del Gobierno.
El AVE es la estrella
Es el proyecto más importante para el Gobierno de Mariano Rajoy, desde su ascenso, ninguna inversión pública ha recibido más fondo y más impulso que las líneas de alta velocidad. Pero se ha puesto especial cuidado en hacer coincidir la finalización de un gran número de obras para el año electoral. En concreto, mientras que desde diciembre de 2011 a 2015 el Gobierno ha inaugurado en total 360 kilómetros, para 2015 se tiene previsto dar la salida a más de 1.000 kilómetros.
Mientras que desde diciembre de 2011 a 2015 el Gobierno ha inaugurado en total 360 kilómetros, para 2015 se tiene previsto dar la salida a más de 1.000 kilómetros
El plazo de inauguraciones es innegociable y eso lo sabe bien el Ejecutivo popular. Hace pocos días el mismo presidente inauguraba el tramo de línea de alta velocidad de 162 kilómetros que permite llegar al AVE hasta León desde Madrid pasando por Palencia. La inauguración tenía lugar pese a que la línea tan solo cuenta, de momento, con un tren, o que hasta dentro de ocho meses no podrá alcanzar la velocidad de 300 Km/h debido a que falta el sistema de seguridad homologado. En definitiva, hacer la foto que es lo importante que si se esperan ocho meses se pasan las elecciones.
Pero las obras se están alargando más de lo debido y el Ejecutivo está algo nervioso. De las obras que se debían inaugurar durante el segundo trimestre del año apenas una ha tenido lugar. La llegada del AVE a Zamora (tramo Olmedo – Zamora), se ha retrasado para finales de año. Tampoco se ha inaugurado la vía que unirá Antequera y Granada. El tramo que unirá Monforte del Cid (Alicante) con Murcia no tiene de momento previsto una fecha exacta y podría retrasarse para 2016. Incluso la obra que más esfuerzo está teniendo dada su dificultad el tramo de AVE del paso de Pajares que une León y Asturias todavía está en el aire.
La cosa no acaba ahí, durante el último trimestre están previstas otras inauguraciones. Entre las que destacan los tramos de Valencia y Castellón, Sevilla y Cádiz, Venta de Baños y Burgos y Zamora y Puebla de Sanabria. Aunque es posible que algunos no lleguen a inaugurarse antes de las elecciones, quizás en estos contratiempos radique una de las causas por las que Rajoy ha pospuesto las elecciones lo máximo posible.
Rajoy de ruta por las carreteras españolas
Este viernes el presidente acude a Jaén, tras presidir la reunión del Consejo de Ministros, para inaugurar el tramo Linares-Ibros de la Autovía A-32 acompañado por la ministra, Ana Pastor. La A-32 es la obra más relevante que el Estado ejecuta en la provincia en materia viaria y concentra, con más de 44 millones de euros, buena parte de las inversiones previstas para Jaén en el proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado para 2016. La semana que viene el presidente volverá a Andalucía para inaugurar el último tramo pendiente de la Autovía del Mediterráneo, entre Carchuna y Castell de Ferro, en la provincia de Granada.
Será la tercera vez que visita la región, ya que Rajoy estuvo presente en la inauguración del nuevo puente en Cádiz, puente de la Constitución de 1812. Un coloso ejecutado por Dragados que presume de ser el segundo puente atirantado más grande del mundo, con 69 metros de gálibo vertical o altura sobre el nivel del mar. La altura total alcanza los 185 metros figurando entre las construcciones más altas del país y con una extensión de cinco kilómetros. También presume de la característica española más pronunciada en la contratación pública, el sobrecoste que ha generado, pasando de 288 millones presupuestado a 512, casi el 50% más.
Rajoy prosigue así su amplia agenda de inauguraciones en 2015 que arrancó con la puesta de largo de la conocida como Autovía del Cantábrico (A-8), Rajoy iniciaba dichos actos protocolarios durante 2015. Se trata de una más de las obras de asfalto que se inauguraran en 2015. También se ha inaugurado los nuevos tramos de la A-15 que conectará a Soria con España, tras varios años de parones en las obras.