La desconfianza del consumidor contagia también a los empresarios. Según el INE, el índice de confianza empresarial aumentó un 0,2% en este trimestre, mientras los crecimientos de los trimestres anteriores fueron 0,6% y 0,5%, respectivamente.
A lo largo del año han ido desinflándose las expectativas empresariales. El 18,9% de los gestores de establecimientos empresariales considera que la marcha de su negocio será favorable en el cuarto trimestre de 2016, mientras que el 20,6% opina que será desfavorable. El 60,5% restante considera que será normal. La diferencia entre el porcentaje de respuestas favorables y desfavorables, denominada Balance de Expectativas, se sitúa en –1,7 puntos para el total de España, frente al –1,1 del trimestre anterior.
La confianza empresarial aumenta en el cuarto trimestre de 2016 respecto al trimestre anterior en nueve comunidades autónomas y desciende en las otras ocho. Región de Murcia (3,8%), La Rioja (2,4%) y Aragón (2,3%) registran los mayores aumentos. Por su parte, Illes Baleares (–4,7%), Comunidad Foral de Navarra (–3,1%) y Cantabria (–2,5%) presentan los mayores descensos. Puede destacarse que Madrid, Cataluña y País Vasco, las más desarrolladas, junto con Andalucía, presentan expectativas negativas.
Estas expectativas parecen consistente con una ralentización de la actividad indicada por el Índice de Precios al Consumo cuyos detalles se han conocido hoy. Los datos definitivos no han confirmado la evolución de precios adelantada a final del mes pasado (0,3%). Los precios han subido tan solo el 0,2% anual.
Aunque es la primera vez que el índice se sitúa en positivo desde julio de 2015, este aumento se debe a los precios de los carburantes y la electricidad. Si se descuentan la energía y los alimentos, los precios en septiembre han reducido su tasa anual hasta el 0,8%, una décima menos que el mes anterior. La economía española no acaba de consolidar una senda de actividad que mantenga un nivel de precios que permita a los sectores económicos superar el estancamiento.
El Banco Central Europeo sigue impulsando sus inyecciones de recursos a la economía española. Aunque este mes de septiembre no ha aumentado el dinero puesto a disposición de los bancos si lo ha hecho la compra de activos y bonos empresariales: casi ocho mil millones han sido puestos a disposición de las empresas españolas en compra de títulos.
Miguel de la Balsa