El pasado 2016 ha sido un gran año para CaixaBank. Se cumple el ecuador del plan estratégico iniciado en 2015 que tiene su final en el año 2018 y la entidad no ha podido obtener mejores resultados en su búsqueda del liderazgo en confianza y rentabilidad. Este desarrollo ha llevado a la entidad a obtener un beneficio de 1.047 millones de euros, incrementar los recursos de los clientes en un 2.5% y reducir el índice de morosidad hasta el 6,9%, en el último curso. Pero las miras de la entidad catalana traspasan nuestras fronteras. De hecho, la próxima semana tendrá lugar la finalización de la OPA sobre el banco portugués BPI que llevará a CaixaBank a copar el primer puesto del sector dentro de la Península Ibérica.
Los resultados y las grandes previsiones de futuro de CaixaBank no son sólo si no el resultado de la gran gestión impulsada por Jordi Gual Solé, director de la entidad y la planificación de su consejero delegado, Gonzalo Cortázar. Precisamente ha sido este último quien ha destacado la templanza de la entidad durante los años de recesión económica que ha vivido España: “El comportamiento de la entidad durante toda la crisis ha sido absolutamente diferencial”.
En este sentido, Cortázar ha afirmado que es “un privilegio que exista CaixaBank” por su contribución a la sociedad en unos tiempos tan complicados. De hecho, la entidad catalana ha presumido de contar con 33.000 viviendas sociales y de haber otorgado más de 22.000 daciones en pago de viviendas, con la condonación de toda la deuda y permitiendo que dos tercios de los afectados por estas operaciones sigan residiendo en sus viviendas con el pago de un alquiler subvencionado gracias a la Obra Social.
Pero la sensibilidad de CaixaBank no finaliza aquí. La entidad catalana puede presumir de ser la primera y la única dentro del sector bancario en devolver el dinero a muchos de sus clientes por la abusiva cláusula suelo. Además, Cortázar ha recordado que CaixaBank siempre había rehusado utilizar este tipo de cláusula en sus contratos hipotecarios y que sólo tras la absorción y compra de otras entidades había vivido la aparición de este problema.
De todos modos, que la irregularidad no haya sida creada por CaixaBank no implica se quede sin solución. De hecho, tras la sentencia del Tribunal Supremo Europeo ya ha preparado una partida de 650 millones de euros para afrontar todas las devoluciones de los clientes que reclamen por haber sufrido un trato abusivo con la inclusión de la cláusula suelo.
Gran presencia en territorio nacional
El buen comportamiento del ente financiero no sólo se ha proyectado al exterior, sino que también se ha reflejado de puertas para dentro. Es así como se explica que a pesar de haber reducido el gasto en un 18% desde 2011 esto no haya supuesto una disminución de sus recursos. Es más, Caixabank es sin lugar duda la entidad financiera con mayor presencia física en el territorio nacional. De hecho, el 90% de los ciudadanos españoles tienen una oficina de CaixBank en su municipio.
Este número de sucursales podrías verse ampliado en los próximos meses si finaliza con éxito la OPA iniciada sobre el banco portugués BPI. Esto supondría una expansión del mercado y la apertura de nuevos puntos en el país vecino. “Ya somos líderes a nivel nacional, pero queremos consolidar nuestro liderazgo Ibérico”, ha afirmado Cortázar durante la presentación de los resultados anuales de 2016. De producirse, CaixaBank realizaría una inversión en un banco que cuenta con 545 oficinas, más de un millón y medio de clientes y con el que le une una alianza de más de 20 años.
Adaptarse a la era tecnológica
CaixaBank, a través de su consejero delegado, también ha marcado los cinco grandes objetivos a conseguir después de haber alcanzado el nuevo plan estratégico iniciado en el año 2015 y que finaliza en el 2018. Entre esos cinco objetivos destaca la digitalización para mejorar la calidad del servicio. De hecho, la entidad ha realizado un estudio que ha dado como resultado que el 43,1% de sus clientes ya se han digitalizado, aunque también se observa como este mayor interés por la tecnología no ha significado una disminución de las visitas a las oficinas físicas, en las cuales se han presentado el 74% del total de los clientes de CaixaBank. Es por esto por lo que Cortázar ha destacado la importancia de “adaptarse” a los nuevos tiempos tecnológicos, pero sin realizar cambios bruscos. “No hay que ver a la tecnología como una amenaza o como un peligro, sino como una palanca de cambio”, ha afirmado el consejero delegado.
Para esta transición, la entidad catalana ha decidido invertir en la compra de 22.220 'tablets' que permiten al empleado prestar un mejor servicio a los clientes en las distintas oficinas repartidas en el territorio nacional. La caja también puede presumir de haber alcanzado las 14 millones de firmas electrónicas que se han conseguido entre otras cosas por la apertura de la aplicación ‘Imagin Bank’. “Tu banco móvil y sin comisiones”, ha afirmado Cortázar.
Para finalizar, CaixaBank puede presumir de destinar 500 millones de euros anuales a la Fundación Bancaria La Caixa (su accionista de referencia) para financiar su Obra Social. «Hemos hecho más que nadie y manteniendo unos niveles de rentabilidad que nos han permitido seguir dotando esto fondo de 500 millones para La Caixa», ha afirmado Cortázar. Además, cerca de 5.000 empleados están implicados en el programa del voluntariado de la fundación.
Carlos Lospitao