La posibilidad de marcar esta casilla solidaria, que estará habilitada a partir del 4 de julio, se estableció en los Presupuestos Generales del Estado de 2018 para las empresas que terminaran su ejercicio fiscal -que no tiene que coincidir necesariamente con el natural- a partir de la aprobación de las cuentas, en julio del pasado año.
En el caso de las empresas cuyo ejercicio fiscal coincide con el natural, la liquidación definitiva del impuesto de sociedades del ejercicio 2018 tiene que realizarse entre el 1 y el 25 de julio de este año y será en esta presentación donde por primera vez tengan la posibilidad de marcar la casilla de fines sociales.
La normativa señala que, al marcar la casilla, se dedica a subvencionar actividades de interés social el 0,7 % de la cuota íntegra del impuesto de sociedades.
En el ejercicio 2016 -último dato disponible-, la cuota íntegra acumulada del impuesto de sociedades ascendió a 23.475 millones de euros. Si en ese ejercicio todos los contribuyentes hubieran marcado la casilla social -algo imposible porque aún no estaba disponible-, se habría destinado el 0,7 % de esa cantidad a fines sociales, es decir, unos 164 millones de euros.
Esta cifra potencial será previsiblemente más alta en la liquidación de 2018, ya que de acuerdo a los datos provisionales de la Agencia Tributaria el impuesto de sociedades devengado el pasado año se situó en 24.401 millones, un 28 % más que en 2016 (19.051 millones).
Para gestionar estos fondos, el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social prevé aprobar a finales de año un real decreto que permitirá convocar las primeras subvenciones en la primavera de 2019, según apuntaba esta semana el subsecretario del ministerio, Carlos Hernández Claverie.
Las subvenciones serán gestionadas y concedidas desde la Secretaría de Estado de Servicios Sociales y se destinarán a promover la investigación, el desarrollo y la innovación en el Tercer Sector de Acción Social de ámbito estatal, modernizar el Tercer Sector e impulsar la cultura de derechos de las personas más desfavorecidas, según señalan fuentes del Ministerio de Sanidad.
El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha animado a las empresas a marcar la casilla solidaria y trasladará este compromiso en la asamblea general de la patronal que se celebra el 4 de julio, según aseguraba en un acto celebrado esta semana.
Desde la Plataforma del Tercer Sector, su presidente, Luciano Poyato, ha defendido que los fondos sirvan para «fortalecer el tercer sector, fomentar la investigación y ayudar a las personas más desfavorecidas».
La casilla solidaria del impuesto de sociedades es similar a la que ya existe en la declaración de IRPF, por la que los contribuyentes que lo deseen pueden dedicar un 0,7 % de sus impuestos a la Iglesia Católica y otro a fines sociales.
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