Tras un primer trimestre «excepcional», en el que se invirtió en el sector la cifra casi récord de 4.000 millones de euros -el doble que en el mismo periodo de 2019-, la actividad se ha frenado, pero el apetito internacional sigue latente, por lo que la consultora espera un repunte sobre todo en la última parte del año.
El segmento de vivienda en alquiler y el logístico son los dos grandes polos de atracción de inversores, junto con las oficinas ‘prime’ en Madrid y Barcelona, mientras que los locales y centros comerciales y los hoteles son los activos más penalizados.
La revisión de previsiones de CBRE afecta de forma significativa al mercado residencial, donde la estimación de 600.000 viviendas vendidas este año baja entre un 20 % y un 25 %, hasta las 425.000 o 450.000.
Los precios también se ven afectados, con bajadas de entre el 2 % y el 4 % en las viviendas de obra nueva y del 6 % al 7 % en las de segunda mano, aunque estas no afectan a los mercados de Madrid y Barcelona.
El auge del alquiler y por extensión del llamado ‘build to rent’ (construir para alquilar) se refleja ya en un aumento de la inversión en este segmento del 23 % en el primer semestre del año, respecto al mismo periodo de 2019.
El impacto de la covid afecta también de forma negativa a la inversión en oficinas, que pasa de los 550 millones de euros previstos a principios de año a 325 millones en Madrid y de 350 millones a 175 en Barcelona, con una caída de la contratación del 50 % respecto a 2019.
El informe presentado este miércoles contempla, no obstante, que el mercado en Madrid aguante y que las rentas se mantengan estables.
También señala que, aunque disminuya la superficie demandada, la necesidad de contar con más metros cuadrados por empleado para garantizar la distancia social servirá de compensación.
A medio plazo CBRE prevé oficinas rediseñadas para proporcionar una experiencia distinta a la de trabajar en casa, lo que aumentará la calidad del stock y seguirá atrayendo a inquilinos e inversores.
En los centros comerciales, donde las afluencias alcanzaron niveles del 70 % en la tercera semana de junio respecto al mismo mes de 2019, el informe destaca que, si bien se ha reducido el número de visitantes, el ticket medio ha aumentado entre un 10 % y un 15 %.
Más dependientes del turismo, las principales calles comerciales de Madrid y Barcelona están todavía al 40 % de afluencia.
En cuanto a la inversión en este segmento, CBRE detecta cada vez más interés por las empresas de distribución de alimentos, tras su declaración como servicio esencial durante el estado de alarma.
Respecto al impacto en los hoteles, en los que Exceltur prevé una caída de negocio del 50 % a cierre del año, CBRE cree que la demanda se recuperará en fases durante 2021 y que en 2022 volverá a niveles ‘precovid’.
Una recuperación que empezará por las zonas con mayor demanda doméstica, y en la que Madrid y Barcelona serán de los mercados que más tarden en reactivarse por la importancia del turismo de negocios e internacional.
Estrella Digital