El número de ocupados disminuyó en 1.074.000 personas en el segundo trimestre de 2020 respecto al anterior, en los meses más duros del confinamiento por la pandemia de la COVID-19 y en la que supone la mayor destrucción trimestral de empleo de la Encuesta de Población Activa (EPA).
Según los datos publicados este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), esta cifra, que no incluye a los afectados por un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), unos 3,4 millones, deja el total de ocupados en 18,6 millones.
No obstante, el INE señala que los ERTE sí que han tenido reflejo en las horas efectivas de trabajo realizadas, que han disminuido un 22,59 % respecto al primer trimestre, así como en el número de ocupados que efectivamente han trabajado en el segundo trimestre, que baja a 13,9 millones, el 35,14 % de la población de 16 años y más.
En total, el INE detalla que 4,7 millones de ocupados declararon no haber trabajado en la semana anterior a cuando fueron entrevistados para esta EPA.
Esta cifra, donde se incluyen diversos supuestos (como vacaciones, excedencias o enfermedad), refleja el fuerte incremento de personas acogidas a un ERTE, que se incrementaron en 2,8 millones en este trimestre.
En total, 3,4 millones de personas apuntaron estar sin trabajar por paros parciales de empresas (1,6 millones) o por regulaciones de empleo (1,8 millones).
En cuanto al paro, ha aumentado en 55.000 personas hasta los 3,36 millones, lo que deja la tasa en el 15,33 %.
El INE recuerda en este punto que no todos los que han perdido su empleo han pasado a clasificarse como parados, al no poder buscar empleo, y que una parte considerable ha pasado a la inactividad, categoría que ha aumentado en 1.062.800 personas.
El número de inactivos alcanza los 17,6 millones, el más elevado desde que comenzó la serie en 1976.
Este incremento de la inactividad se debe fundamentalmente a que el confinamiento y el cierre de empresas impidieron a 1.628.500 personas buscar empleo a pesar de estar disponibles para trabajar.
La EPA también refleja que 1.034.200 ocupados y 1.107.600 parados del primer trimestre han pasado a la inactividad en el segundo.
«No se ha producido una reducción del empleo y del paro del mismo orden debido a la existencia de movimientos en sentido contrario que han compensado parcialmente el descenso de la actividad», señala en su nota el INE.
En el último año el empleo ha disminuido en 1.197.700 personas (616.800 hombres y 580.900 mujeres), un descenso del 6,05 %.
Por sectores, y de vuelta a la evolución trimestral, la ocupación cayó en todos con el grueso de la destrucción en el sector privado: agricultura (21.400), industria (127.000), construcción (108.700) y servicios (816.900), con el mayor descenso.
En cuanto al tipo de contrato, los empleos indefinidos descendieron en 361.400, mientras que los temporales se redujeron en 671.900.
La tasa de temporalidad disminuyó así en 2,66 puntos, hasta el 22,35 %.
Por sexo, el empleo disminuyó en el trimestre en 527.800 hombres y en 546.200 mujeres. Por nacionalidad, la ocupación bajó en 828.700 personas entre los españoles y en 245.300 entre los extranjeros. Por edades, afectó a todos los grupos.
En los autónomos, disminuyeron en 36.100 personas en variación trimestral y en 34.600 en el último año.
Por comunidades, Baleares fue la única comunidad en la que aumentó la ocupación este trimestre, en 9.200. En el resto, los mayores descensos se dieron en Cataluña (223.700), Andalucía (198.100) y Madrid (184.400).
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