Durante su intervención en la clausura del Foro Tendencias organizado por «El País» y la consultora Kreab, la vicepresidenta ha defendido que «hay un enorme consenso social» y económico sobre los retos de la economía española y las reformas que es necesario emprender, por lo que ha considerado «de sentido común que ese consenso social se traslade al arco parlamentario».
Estos objetivos, entre los que figuran las transiciones ecológica y digital, se han hecho «más urgentes» con la pandemia y figurarán entre las prioridades de los fondos del plan europeo de recuperación, con el que se pretende situar el crecimiento potencial de la economía por encima del 2 %.
«La pandemia ha supuesto una disrupción profunda» en la economía española, ha admitido, al tiempo que ha asegurado que «siempre y cuando seamos capaces de controlar los inevitables rebrotes» la recuperación tendrá forma de «uve asimétrica».
En ese sentido, el Gobierno seguirá «tomando las medidas que hemos empezado a tomar desde marzo», como el apoyo a la liquidez del tejido productivo, al empleo o a la renta de las familias con el objetivo de tener «una base sobre la que abordar la transformación de la economía».
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