Los medios electrónicos de pago han llegado para quedarse y son utilizados a diario por millones de personas porque resultan muy cómodos. Sin embargo, una gran parte de los consumidores está recuperando la costumbre de pagar con dinero en efectivo.
Con la llegada de la pandemia, se aconsejó a todo el mundo efectuar sus pagos con medios electrónicos como tarjeta o Bizum, ya que se consideraba que monedas y billetes que habían pasado de mano en mano podían ser una fuente de contagio del Covid-19.
Superado lo peor de la pandemia, muchos consumidores han continuado con el hábito de pagar todas sus compras, incluso las más pequeñas, a través de medios electrónicos, utilizando su tarjeta de crédito o débito o, directamente, el móvil o un smartwatch. No obstante, en los últimos meses se aprecia un cambio de tendencia.
Estudio sobre hábitos en el uso de efectivo en 2022
El estudio “Hábitos en el uso de efectivo en 2022”, elaborado por el Banco de España, ha puesto de relieve que el pago con medios electrónicos ocupa el segundo lugar entre las preferencias de los españoles.
El informe concluye que el dinero en efectivo es el medio de pago más utilizado por casi la
totalidad de la población. De los encuestados, un total de tres de cada cinco personas manifestó utilizar dinero en efectivo a diario. Un 26% confirma que utiliza dinero en efectivo una o más veces por semana, y el resto tienen un uso mucho más residual de los billetes y las monedas.
El segundo medio de pago más utilizado es la tarjeta de crédito o de débito. Un 32% de los encuestamos manifestaron que la usan a diario. Hay un 50% de la población que utiliza dinero en efectivo a diario, pero no tarjeta, y un 18% que utiliza la tarjeta a diario y no suele usar dinero en efectivo.
El tercer medio de pago más utilizado es el dispositivo móvil, y después se sitúa Bizum, cuyo uso ha crecido notablemente en los últimos meses.
El perfil de los consumidores que usan cada medio de pago
El informe del Banco de España señala que el uso de medios de pago se ve influenciado por cuestiones como la edad, el sexo y el nivel de estudios. Así, el pago en efectivo es más común entre los hombres, las personas mayores de 45 años y quienes tienen estudios básicos.
A mayor edad del consumidor, más posibilidades hay de que realice sus pagos con dinero en efectivo. Entre los jóvenes, un 43% utiliza el efectivo a diario, y entre los mayores de 54 años la cifra se dispara hasta el 71%.
El uso de tarjeta es preferido por el grupo de edad de entre 25 y 34 años, apreciándose una mayor utilización por parte de mujeres y de personas con estudios superiores.
Por lo que se refiere al uso del móvil para pagar, no se aprecian diferencias significativas por sexo, pero sí por edad, ya que es un medio utilizado principalmente por los menores de 35 años.
Más privacidad y control
Entre las razones que llevan a los españoles a preferir el pago en efectivo, destacan una mayor privacidad y un mayor control sobre el gasto.
Al pagar en efectivo no queda registro de la compra realizada, por lo que solo el consumidor sabe que esta se ha llevado a cabo.
La subida de los precios también está impulsando el uso del efectivo. Muchos consumidores que se habían acostumbrado a los medios electrónicos, están volviendo al dinero físico para tener un mejor control de lo que gastan en sus compras y ajustar mejor su presupuesto.