El Índice de Producción Industrial (IPI) ha vuelto a tasas negativas tras el incremento del 5,4% registrado el pasado mes de marzo.
El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha informado de que el pasado mes de abril se produjo una contracción del 4% del IPI, lo que supone el mayor retroceso desde enero de 2021. En comparación interanual, el índice de abril estuvo un 0,9% por debajo del del mismo mes del año pasado.
Producción industrial por sectores
La industria de bienes de consumo duradero fue la que más acusó el descenso en la producción durante abril, con una media en la caída del 9,9%.
La industria de bienes intermedios vio bajar su producción un 6,5% durante el cuarto mes del año, mientras que la fabricación de bienes de consumo no duradero descendió un 4,6%.
Por ramas de actividad, la industria más afectada por la caída del IPI fue la de la madera y el corcho, con una pérdida del 23,9% del volumen de producción. Seguida de la del cuero y el calzado con un 18,2%, y la confección de prendas de vestir con un descenso del 13,7%.
No obstante, también hubo sectores que experimentaron repuntes. Especialmente destacable es el caso de las industrias extractivas, que vieron crecer su actividad un 41,8%.
Un fenómeno que se produce a nivel europeo
La falta de nuevos pedidos y la bajada de la demanda externa han llevado a las empresas manufactureras españolas a reducir de producción. Lo cual ha tenido un efecto directo en los precios, haciendo que estos desciendan.
El mercado manufacturero español está en niveles mínimos en cuanto a precios desde 2022, pero algo similar está ocurriendo en toda Europa.
Durante el mes de julio, el sector de las manufacturas de la zona euro volvió a experimentar una nueva contracción. El índice PMI se sitúo en 42,7 puntos, frente a los 43,3 que había tenido en junio. El dato de julio se convierte en el peor registrado en los últimos 38 meses.
Los expertos ya empiezan a hablar de una recesión prolongada para las manufacturas europeas. Con las caídas en los nuevos pedidos y los volúmenes de compra en descenso, se espera que el segundo semestre del año sea complicado.
La producción se contrae en Estados Unidos
Los datos que llegan desde el otro lado del Atlántico tampoco son particularmente buenos. Según ha informado la Reserva Federal de los Estados Unidos, la producción industrial se contrajo un 0,5% en junio en este país. Esta fue la segunda contracción consecutiva, puesto que en mayo se había registrado un descenso del 0,4%.
La fabricación de bienes de consumo ha cedido un 1,3% mensual y, en su conjunto, los productos acabados perdieron un 0,9% entre mayo y junio.
Las manufacturas tampoco remontan en China
El sector industrial también atraviesa dificultades en China. Aunque la economía del gigante asiático crece, lo hace a un ritmo menor del esperado. Esto se debe, en parte, a que las manufacturas se están estancando.
Los nuevos pedidos llegan a un ritmo menos intenso que a principios de año, lo cual se está dejando notar en la tasa de desempleo juvenil, que continúa aumentando. +
No solo han descendido las exportaciones, una de las principales fuentes de ingresos del país asiático, sino que también se aprecia un importante descenso en el consumo a nivel interno.
En China ya se está extendiendo un cierto temor a que su economía pueda entrar en recesión, y los expertos destacan la necesidad de que se adopten políticas que eviten esta situación.